En la primera ronda quedó entre las parejas con los puntajes más destacados, y este jueves Guido Záffora (35) llega nuevamente a la pista del Bailando 2023 para seguir sumando elogios del jurado, buenos números y avanzar en la competencia.
Aunque ya no es la primera vez que es nombrado por Marcelo Tinelli para pasar al escenario, pero los nervios siguen como en su debut. El panelista de Intrusos (América TV), tiene muchas ganas de llegar a la final del reality, por lo que vive el antes, durante y después de cada gala con mucha intensidad.
En una charla con Revista GENTE, luego de su debut Guido confesó cómo vivió la previa en su camarín. Si bien no tiene cábalas, a partir de ahora, usará un método que le funcionó en la primera gala y fue relajarse.
Mientras en la parte de afuera había mucho ruido -por la cantidad de gente propia de un reality-, el periodista se fue a su camarín, al primer piso, se tiró en el suelo y se puso unos cuencos tibetanos, un sahumerio y pensó en todo el camino recorrido con agradecimiento.
Pero no todo fue meditar, con confianza y entre risas, Záffora nos confesó: "Y otra cosa que hice que luego me dio mucho miedo, fue tomarme medio de gin tonic. Me dio mucho miedo porque pensé que podía pegarme el alcohol", dijo entre risas.
"Mirá si entraba borracho, si entraba en pedo (a la pista), me muero".
La confesión de Guido Záffora en la previa del Bailando 2023.
El miedo del panelista por haber tomado un trago antes de salir a bailar, es que su coreografía era muy técnica, entonces ese era su miedo, poder fallar. "Pero me tomé un vaso de gaseosa después y se me fue. Así que entre a disfrutar y a divertirme a la pista", agregó con humor.
"Esa noche medité un poco y me concentré en la sensación. Tenía mucho miedo, pero ese miedo acá fue parte importantísima del proceso, porque realmente fue como saltar al abismo y creo que el salto fue más que auspicioso. Era saltar y salté, y eso me lo valoro mucho. Entonces, esa va a ser mi cábala: relajarme en el camarín antes", contó sobre su estrategia para relajarse.
-Para algunos es sólo un certamen, para otros una gran oportunidad el formar parte de las figuras del "Bailando" ¿Cómo lo ves vos? ¿qué representa esto en tu carrera?
-Para mí es una gran oportunidad para mostrarme desde otro rol, desde otro lugar. Me encanta hacer lo que hago, me encanta ser periodista y me encanta ser conductor. De hecho, ahora debutamos con Pampito en Estamos Okey, que va los domingos por América, y eso me recontra ilusiona y me da energía para seguir adelante. También es conectar con mi parte artística. Sueño con hacer una gran comedia musical, que me tengan en cuenta, que me llamen para laburar y estar arriba del escenario. Esa es otra parte, mi otra pasión, mi otra parte del corazón. Entonces, poder fusionar todo es muy espectacular
