Radicada en Alemania desde hace más de diez años, Evangelina Anderson se mantiene conectada con la Argentina a través de las redes sociales. La modelo comparte a diario su rutina y la de sus hijos en Instagram. En ese contexto, en las últimas horas publicó imágenes donde dejó ver el impresionante colegio al que asisten sus hijos Lola, Bastián y Emma, fruto de su amor con Martín Demichelis.
Ya la entrada a la institución es todo un sello del lugar ya que se trata de un llamativo túnel de colores por donde los chicos deben pasar para llegar hasta el portón que permite el ingreso a la propiedad. "Les voy a mostrar un poquitín del cole de los chicos", comentó Anderson en sus Instagram Stories.
Y agregó: "Esta es la entrada del cole, allá está el parking para los papás y los maestros. Todos los alumnos tienen que pasar por el túnel del arcoíris para ingresar".
Confidente con sus seguidores, Eva explicó que la institución ubicada en Múnich, posee más de una estructura artística en sus distintos espacios ya que buscan incentivar a los niños a la hora de aprender y de estudiar. Un árbol de muchos colores en el comedor y los casilleros verdes, súper llamativos, en lo que parece ser el vestuario son otros de los detalles distintivos del lugar.
Por último, mostró el enorme parque donde sus chicos disfrutan de los recreos en compañía de sus compañeritos.
Evangelina Anderson y su inmensa casa en Munich
Instalados en Munich durante la cuarentena estricta por la pandemia en 2020 y luego de que Demichelis aceptara la propuesta para ser DT del equipo sub 19 del Bayern, Evangelina en pleno invierno europeo mostró en sus historias parte de la exclusiva casa que disfrutan en familia.
“Es un lugar que nosotros queremos mucho. Volvimos a la misma casa de Alemania donde vivimos hace doce años, donde nació nuestra familia”, contó la modelo. Justamente en esa localidad alemanda fue donde nació su primer hijo, Bastian. Y luego le siguieron Lola y Emma.
La familia, que dejó su “casa de España intacta para volver a escaparnos del frío cada vez que podamos”, se está adaptando a la nueva ciudad. Mientras sus hijos concurrían al colegio, Evangelina había aprovechado el tiempo libre en casa para aprender alemán junto al “profe Demi”, su marido.
