Thiago Medina conmovió desde el primer día adentro de Gran Hermano, ya que atravesó una difícil historia de vida que decidió compartir durante su estadía en el reality. Antes de entrar a la casa más famosa del mundo, trabajaba en el Mercado Central. Y ahora, con algunas semanas vividas después del aislamiento, decidió ir a visitar a sus excompañeros, que lo recibieron con sonrisas y abrazos.
El joven posó con el cartel de la entrada, en donde se puede escuchar cómo gritan su nombre los automovilistas que están a punto de ingresar al mercado. Su sonrisa de oreja a oreja marcó la alegría del momento. Pero todavía faltaba lo mejor: el reencuentro con sus amigos del trabajo.
En apenas 22 segundos, el joven logró dar un pantallazo general de lo que fue su paseo. Sus amigos lo saludaron con un cálido abrazo y hasta le pidieron fotos durante el rato de almuerzo. "Te felicito, igual vos ganaste", le dijo una mujer con quién compartía horas de trabajo.
Roberto Funes Ugarte y Thiago fueron juntos al Mercado Central
La repercusión en redes por la visita de Thiago al Mercado Central fue tal que el móvil de A la Barbarossa llevó a Robertito Funes Ugarte y al exjugador directo a Tapiales. El graph lo definió como "el rockstar del Mercado", ya que a su paso iba saludando a todos como una verdadera estrella.
"Laburé en todos lados acá, me siento muy contento por el recibimiento de toda la gente", aseguró, sonriente. Además de sus compañeros, a los que dijo extrañar por la cotidianidad perdida, los clientes también se acercaron a saludarlo y felicitarlo por cómo se desenvolvió adentro de la casa.
Thiago ya tiene planes para el futuro: le gustaría abrir su propia verdulería. Deslizó tener ganas de poner un lavadero de autos, pero actualmente se encuentra buscando alquiler en su barrio para poner el local de frutas y verduras, que atenderá junto a su hermano.
En el piso del programa estaba Alexis, su excompañero de casa, quien se propuso como socio inversor para llevar su sueño a cabo. "Si hay ganas de laburar, hay capital", sentenció el Conejo.
