Antes de que Diego se sometiera al hisopado que diera negativo en los últimos días, el músico le mandó una misiva para acompañarlo y aconsejarlo –a su estilo– en los días de cuarentena.
No fue en mensaje por WhatsApp. Tampoco uno de voz. Se acercó un papel, puso un marcador azul entre sus dedos y empezó a escribir, como quien desea hacer sentir bien al otro. “Querido amigo”, arrancó, y al gesto de ir completando de puño y letra –algo bastante poco común en los tiempos que corren– habría que sumarle un detalle más que relevante: quien se tomó el tiempo y el trabajo fue nada menos que Charly García (68), y quien se emocionaría ante semejante gesto, ningún otro que Diego Maradona (59).
El desenlace sucedió unos días atrás, en medio del difícil aislamiento social, preventivo y obligatorio que cumplía el Diez, debido al encierro y la imposibilidad de trabajar, y antes de que le saliera negativo, en las últimas horas, el hisopado para detectar el Covid-19. Fue cuando Matías Morla, el abogado del DT de Gimnasia y Esgrima La Plata, se acercó a la nueva casa de Brandsen de Maradona, dentro de un barrio privado en la Ruta 2, para acercarle la sorpresa.
La sonrisa de Maradona pronto se convirtió en reflexión frente al primer párrafo de Charly: “Yo pasé por internaciones en las que gasté dos o tres años de mi vida, en clínicas, escuchando a psicólogos que niegan a 'gente diferente'. Es imposible que entiendan a 'gente diferente'", señalaba antes del remate, que emocionó al ex futbolista: “Te doy un consejo: seguirlos es una absurda estupidez y recordá que sos un genio y que todos te aman. Contá conmigo. Charly”, cerró el artista.
Diego no sólo le agradeció la carta a Charly, sino que ya arreglaron volver a verse cara a cara cuando la pandemia del coronavirus lo permita.