Son las 8:25 de la mañana en Argentina, y Claire Foy (39) aparece radiante del otro lado de la pantalla vestida con un saco y un chaleco de color gris tostado. Lleva el pelo recogido, tiene un make up natural que resalta su mirada celeste y sus humectados labios, y nos saluda amablemente desde un despojado living que cuenta con amplios ventanales que iluminan el espacio.
–Hola Claire, gracias por estar ahí. ¿En qué parte del mundo estás?
–¡Hola por ahí! Yo estoy en Londres, una ciudad grandiosa (allá ya son las 11:25 AM).
–Nosotros en Buenos Aires, Argentina. ¿Conocés cosas de nuestro país o personalidades como Lionel Messi o la reina Máxima?
–Sé quién es Messi, y también sé que me gustaría ir a Argentina. Muchos amigos fueron y tuvieron experiencias asombrosas, así que estoy desesperada por ir.
–¿Ya sabes qué quisieras hacer durante tu estadía?
–Sí. Si pudiese, visitaría Buenos Aires y los glaciares. Quisiera bailar un poco, comer comida deliciosa, tomar un vino encantador y probablemente no irme nunca (extiende su sonrisa). ¡Ese sería mi sueño!
–Estaríamos felices de tenerte por acá.
–¡Fabuloso entonces!
–Hoy tenemos el placer de hablar con vos gracias a la película "Todos somos extraños". ¿Qué te interesó del proyecto?
–Que Andrew Haigh la escribió y la dirigió, y él es un cineasta extraordinario que siempre admiré, por lo que me entusiasmé sólo con saber que querían que lea un guión suyo. Por otra parte, Andrew Scott es mi amigo –y un actor asombroso–, y el libreto era hermoso y simple pero lleno de corazón y no tenía cinismo… algo extraño. Objetivamente, cuando uno lee muchos guiones, es bastante raro encontrar uno tan honesto y desgarrador, así que no pensé mucho sobre si quería o no hacer este trabajo: lo mío fue un “sí” desde el comienzo.
–Nos regalaste una imagen visual y queremos confirmarla: ¿en tu casa tenés pilas y pilas de guiones de películas que vas leyendo hasta encontrar los personajes que te seducen?
–Supongo que leo bastante, pero ya no me los entregan como antes en papel, ahora están todos en el iPad.
–No suena tan pintoresco.
–No tanto (sonríe).
–Después de interpretar a un personaje tan icónico y masivo como lo fue el de la reina Elizabeth II en "The Crown", ¿sentís una presión distinta a la hora de elegir tus roles?
–Mentiría si digo que sí. Yo sigo mi instinto, como siempre, y trato de no pensar mucho en la percepción del afuera porque, cuando lo hacés, ya no lo hacés por vos, sino por alguien más.
–¿Cómo son las mujeres que buscás representar?
–¡Espero que creíbles! Me interesan mucho las películas y los personajes que son cercanos a la gente y que vivieron vidas pequeñas –porque no escalaron el Monte Everest ni nada por el estilo–, pero tuvieron vidas enormes en cuanto a experiencias y emociones: a quiénes amaron, cómo amaron. Me interesa acercarme a quiénes son como personas.
–Tu nuevo personaje, el de la madre de Andrew Scott en "Todos somos extraños", ¿qué te dio?
–El guión me pareció asombroso por todo lo que no se dice entre los personajes, porque es como las familias hablan, y eso no se puede subestimar: esta película es fiel a la forma en la que se involucran realmente las personas. También sentí que este personaje es un montón de madres que conozco, cantidad de mujeres de una generación que crecieron con ciertos valores en una época distinta… y ella, en particular, ama a su hijo y como tiene una vida bastante corta no llega a tener el tiempo que hubiese querido con él, así que yo me identifiqué con la necesidad de esa conexión.
–Esta historia va a provocar que la gente piense en qué pasa después de la muerte (N. de la R.: Claire encarna a la madre fallecida del protagonista, quien al visitar la casa de su infancia se reencuentra con sus padres y sostiene varios diálogos como si sucedieran en el presente)... ¿Es algo que te sucedió?
–Sí… creo que siempre nos estamos haciendo esas preguntas, o no, porque no queremos saber cuál es la respuesta. Supongo que cuanto más crezco, más lo veo como algo que tengo que abrazar y aceptar, y, deseablemente, entusiasmarme al respecto porque ¡quién sabe qué va a pasar! Pero como actores tratamos de no responder muchas de estas cuestiones. Diría que en esta película no intentamos hacer una declaración sobre la vida después de la muerte, sino que procuramos vivir alrededor de ese lugar donde las memorias son nítidas y donde los sueños se sienten reales, como cuando tu corazón late fuerte y despertás transpirado. A mí me gusta creer que esta pareja vive en un mundo donde podrían estar disponibles para su hijo cuando él los necesite, pero no traté de darle mucho más sentido que eso.
–Entonces, al interpretarla, ¿no sentiste que estabas encarnando su vida después de la muerte?
–No… porque no sé cómo hubiera afectado eso a los personajes. Traté de formar en mi cabeza cómo era su mundo y cómo eran antes de morir. Amo la idea de encontrar las almas de las personas, eso es fantástico y es algo que no hay que darlo por sentado o tomarlo como algo común. Yo no sentí que está película sea rara o espectral, sólo tan loca como es la vida, ¡que es bastante loca!
–La crítica comenta maravillas de este filme y vos ya ganaste Golden Globes y Emmys, y todavía no tenés cuarenta años.
–¡OMG! Dentro de poco voy a tenerlos... y me siento muy afortunada, porque al hacer algo no sabes cuál va a ser la respuesta o hacia dónde va a ir, y yo tengo la bendición de poder vivir mucho de mi vida a través de mi trabajo. Y esta película me abruma porque fue una cosa chiquita, divertida, honesta, íntima y silenciosa que hicimos en el verano del año pasado, y está teniendo una gran recepción y ya significa tanto para tantas personas, que para mí representa mucho.
–¿Leés lo que la gente comenta del filme en X, el nuevo Twitter?
–No, no tengo Twitter ni X, pero hicimos varias proyecciones y estuvimos haciendo la rueda de prensa de la película por los Estados Unidos, y conocí muchas personas que vieron la película y tuvieron una fuerte respuesta.
–Hablando de impactos, ¿hay algo que te gustaría inspirar?
–(Abre grandes sus ojos) No realmente, y creo que si lo hubiese sería derrotada en el camino. Sólo voy a intentar vivir mi vida de la mejor manera que pueda y trataré de ser una buena persona, aunque probablemente me equivoque la mayor parte del tiempo.
–Lo importante es intentarlo.
–Exactamente. ‘Try your best’.
–¿Algo del resto de tu 2024 que quieras anticiparnos?
–No… ¡ni yo sé que va a pasar en el resto de mi año! Básicamente no estoy pensando más allá de esta semana.
–¿Vivís el momento?
–Trato de hacerlo, sí.
–Muchas gracias por tu tiempo Claire. ¡Ojalá te veamos pronto en Argentina!
–¡Me encantaría! Muchísimas gracias (sonríe despidiéndose mientras toma su blanca taza de té inglés con ribetes metalizados. Es hora de una pausa en su mañana de entrevistas).
Agradecemos a Luciana Domínguez, DDA International y Feedback PR.
Fotos: EFE y cortesía de Searchlight Pictures y StillMoving.Net para Disney