La actriz de diecisiete años, que aprovechó esta cuarentena para publicar su primer libro –Casi amor–, charló con GENTE sobre diversos temas de actualidad.
"Acá estoy, mirando TikTok en el celu... Puedo pasar horas con esta app", arranca contando Chiara Francia (17) desde su habitación de Vicente López, tan rosada como su pelo (tiene tela, acolchado, paredes y almohadones a tono).
"Sinceramente lo que más me costó de esta pandemia fueron las primeras dos semanas –porque pensé que ese tiempo iba a durar la cuarentena–. Pero después, cuando entendí que no iba a salir más de acá, decidí hacer algo con eso... Tuve etapas: una de mucho ejercicio, otra en la que cociné, y el resto, más que nada, escribí, en el escritorio, en la oficina de mamá o en el patio. Me salvó la cuarentena".
–Tus seguidores sólo te conocían como actriz y terminaste lanzando un libro que permaneció como número uno en ventas de Amazon durante dos semanas. ¿Es algo que hacías antes?
–Sí, porque siempre me gustó ver escribir a mi mamá (Marcela Citterio, guionista de novelas como 'Amor en custodia' y 'Patito Feo') . Y en el verano del 2018 arranqué con este libro, que decidí publicar en cuarentena.
–Entonces el libro, que trata sobre el embarazo adolescente, lo empezaste a los quince años. ¿Te inspiraste en la historia de alguna amiga?
–No, no. Siento que es algo polémico pero muy real, que les pasa a un montón de chicas muy marginadas, en la sociedad y en sus casas. Yo quería contar una comedia romántica para ellas, que ellas también pueden enamorarse, que no todo es un drama o algo terrible. Que a ellas les siguen pasando cosas de adolescente normal.
Chiara es la protagonista desde el 2017 de Heidi, bienvenida a casa, serie que está por convertirse en película. "La filmamos en Colombia, a una hora de Bogotá, y fue lo más. Encontramos un hotel en el medio de la nada y fue como un viaje de egresados, porque la pasamos increíble", dice la actriz, que aún no sabe cuándo será el estreno de su debut cinematográfico.
–Hablando de viaje de egresados... ¿El tuyo?
–Me toca el año que viene... ¡Todavía no me lo perdí! Pero no creo que lo hagamos, porque somos cuatro divisiones de treinta personas y es un tema que todos nos pongamos de acuerdo. Quizás me vaya de viaje con mis más amigas.
–Las clases llevan mucho tiempo suspendidas en la Capital. ¿Vos cómo lo ves?¿Tenés ganas de volver?
–¡Ay, me parece tan complicado que vuelvan las clases en este momento...! Porque yo tengo diecisiete y sé que no me va a pasar nada grave, pero tengo miedo de llegar a infectar a mis papás, o que les pase algo a los mismos profesores... Quizás en secundaria es más fácil, pero veo casi imposible que los chicos de primaria puedan volver a clase.
–¿Por qué?
–Porque los niños no tienen tanta conciencia, en el sentido de que a un chico de siete años le decís que no abrace a su amigo y no lo va a entender. No sé... Es muy complejo...
–¿Qué esperarías?
–Una vacuna o un buen protocolo, algo que te haga sentir que no te va a pasar nada, aunque siempre hay un riesgo.
–¿Vos ahora estás saliendo?
–Poco. Estoy casi todo el tiempo en mi casa, pero sí voy a ver a mis caballos, porque disfruto muchísimo mi conexión con ellos. Tengo uno, que es mío y se llama Brucet, y con mamá compartimos otros tres.
–¿Participás en competencias de equitación?
–Empecé a practicar el deporte a los siete años y participo en algunos concursos. Pero me estreso bastante, porque hay mucho estrés, para vos y para el caballo.
–Es una pasión que compartís con Cande Tinelli... Y también la de cambiar de look, ¿no?
–(Ríe) Sí, cambio bastante de look. Tanto, que mis amigos me dicen que voy a quedarme pelada. Espero que no, porque me encanta cambiar mi color de pelo.
Agradecemos a Soy Prensa y Shirly Potaz.