La royal y ex deportista Charlene de Mónaco no quiso perderse la gran final del Masters 1000 de Montecarlo que se saldó con la victoria de Andrey Rublev tras un apasionante partido contra Holger Rune.
En ese sentido, la princesa acaparó todo el protagonismo a su llegada al Montecarlo Country Club junto al príncipe Alberto y sus dos hijos, Jacques y Gabriella, quienes, junto a sus primos, dieron las postales más tiernas y fashionistas del día.
Es que, los mellizos de los príncipes Alberto y Charlene, volvieron a demostrar que dominan la escena pública y que son dignos sucesores del estilo de su madre. Los pequeños, que ya tienen ocho años, impactaron en su última aparición en público donde ejercieron de anfitriones de sus primos, Reigen y Aiva Grace, hijos de Sean Wittstock, hermano de la Princesa.
Los cuatro pequeños escoltaron al soberano y a su esposa en el evento deportivo, una de los competiciones más prestigiosas y una antesala del Roland Garros. Derrochando estilo, aplomo y seguridad, cualidades que ambos herederos han podido desarrollar tras cada acto público en el que les ha tocado participar: pese a su corta edad, son los miniroyals que han participado de más actos públicos y reales en la monarquía europea.
La escolta fashionista de Charlene de Mónaco
Asimismo, los pequeños príncipes hicieron de perfectos anfitriones de sus primos y demostraron que el estilo es cosa de familia. Gabriella lució un vestido azul marino sin mangas con cuello blanco en forma de pétalos de flor, un look que nos dio el mejor estilo de Ray, el personaje que interpretó Dakota Fanning de niña en 'Chicas de la ciudad'.
Por su parte, su prima también lució muy canchera con zapatillas, bolso y un recogido muy original. En tanto, Jacques y Reigen parecían dos pequeños hombrecitos con sus looks casi idénticos: pantalones claros de estilo cargo y chaqueta azul marina con camisa y mocasines. Para protegerse de la luz y elevar su look, los cuatro llevaron gafas de sol, un complemento infaltable del que Charlene de Mónaco no se separa en sus apariciones públicas.
La Princesa de Mónaco y un look 100% Charlene
En esta ocasión, se vio una princesa Charlene con cambio de look, apareció con un corte pixie, que le dio un aire más fresco y jovial al impoluto traje de pantalón blanco que lució en el evento deportivo.
La sudafricana optó por uno de sus estilismos favoritos: la sastrería. Estaba radiante con un tres piezas de color blanco firmado por Akris y cuyo precio supera los 3.000 euros. El look estaba compuesto por un clásico blazer de corte entallado, botonadura central y bolsillos con solapa, lo combinó con pantalones sastre de tiro alto y top con detalle de transparencias, también a tono.
