El pasado domingo Sarah Burlando, la primera hija en común de Barby Franco y Fernando Burlando, fue bautizada con una ceremonia en las playas de Uruguay. La niña fue vestida con un delicado vestido blanco con detalles bordados de flores y unos pequeños escarpines rosas.
En los videos compartidos por Barby Franco en sus redes sociales pudo verse el momento exacto en que la niña fue bendecida. Aunque se desconoce hasta el momento quiénes fueron elegidos como los padrinos de la pequeña, fueron los parientes más cercanos quienes se acercaron a presenciar este lindo momento.
Barby Franco es una gran creyente de la Virgen del Luján, ya que fue a ella a quien acudió un año antes del nacimiento de Sarah para pedirle ser mamá. El pasado mes de octubre se acercó hasta la Basílica de Luján para agradecer y bendecir su pancita, al concluir la peregrinación se tomó el tiempo para contar a GENTE cómo fue su experiencia.
"Fue muy emocionante. Lógicamente no pude hacer la caminata tradicional como Pampita que salió desde Liniers. Yo esperé al grupo de Luján e hice 10 cuadras de procesión, y esperé a todos en la puerta de la Basílica", aseguró la modelo muy feliz de haber podido otro año estar presente en la procesión.
“Eran aproximadamente las 3:30 de la madrugada cuando entramos todos juntos de la mano, abrazados. Fue muy lindo, lloramos todos. Había muchísima, muchísima gente", explicó sobre las fotos que circularon sobre su paso por la Basílica de Nuestra Señora de Luján.
Un dato desconocido hasta el momento sobre la vida de Barby Franco y que también da cuenta de su vínculo con la virgen es que ella también se llama Luján. "Yo me llamó Luján porque mi mamá hizo lo mismo para que yo existiese, caminó, pidió y después fue a agradecer al año siguiente ¡Y acá estamos!", recordó, emocionada por las vueltas de la vida que la pusieron también a ella en esta situación.
Pampita con quien Barby se conoce desde hace muchos años también fue un pilar importante en su vida en este tiempo. A ella también, después de tantos años, la vida le sonríe y se encuentra más feliz que nunca junto a su esposo, Roberto García Moritán, su pequeña hija Anita y sus familias ensambladas.
"Pampita es una gran pieza en mi vida. Me ayudó muchísimo en lo emocional y espiritual. Es una gran amiga!!", cerró Barby Franco.
