En el año 2021 terminó por reglamentarse una ley muy importante en Argentina, la Ley de Talles. Sin embargo, es sabido que hasta el momento existe un incumplimiento a esta norma vital para asegurar a todas las personas el acceso a distintas prendas.
La periodista Agustina Kämpfer en uno de sus tantos viajes al exterior se tomó el tiempo para mostrar la diferencia que existe entre el mercado local y el europeo. En este último, la oferta de talles es mucho más grande y accesible para los habitantes.
“La tiranía de los talles en Argentina es inexplicable. Esta industria sólo puede sobrevivir con clientas y clientes que se esmeren desmesuradamente por entrar en lo que ofrece, cuando debería ser exactamente al revés”, comenzó diciendo impactada aun por su descubrimiento en su publicación.
Y continuó, “Les comparto mi experiencia desde los probadores españoles de una cadena irlandesa de ropa que además de ser accesible -verán que a la remera de la frutilla la pagué 2,50 eur-, vende prendas por toneladas. Acá no hay talles reales ni irreales, hay talles para la realidad de una cadena que quiere vender, con clientas que quieren comprar. ¿Sos flaquísima?: sos 2XS, y a partir de ahí va subiendo, en una escala que, más que inclusiva, la llamaría razonable y rentable”.
Según dio a conocer este año El Cronista, el 65% de las personas en Argentina tienen problemas para encontrar su talle adecuado de ropa, algo de lo que no a escapado Kämpfer durante su vida. "Antes de darme cuenta de que en este lugar la cosa es así, fui a por los talles que compro en Buenos Aires siempre: me quedaban enormes (tengo ropa “made in arg” XL que si pido postre ya no me entra). En casa soy M, a veces L. Resulta que en España soy S y XS ¡Pues claro, tía, si hay tantos tamaños de cuerpos, pos como vamos a limitarnos a tres tallecitos, joderrr!”, explicó desmitificando los irreales talles existentes en nuestro país.
Y finalizó, "Al cuento de asomar la cabeza por la cortina del probador y “¿me traés un talle más?” lo vivimos todas. Y muchas veces, la respuesta es “tenés puesto el más grande”, que le queda de guante a la que pesa 60 kilos. La oferta textil nacional es un monstruo".