Fue amigo de Lady Di, Madonna y Elton John. Su trágico asesinato, perpetrado el 15 de julio de 1997 por Andrew Cunanan, en la puerta de su residencia en Miami Beach, acaparó todos los titulares. Su horrendo final en palabras de Donato de Santis, el cocinero que era chef en su mansión. Cómo fue el adiós a ataúd abierto. Y la nueva serie que se centra en la psiquis de su ultimador.
Tenía 50 años. En la mañana del 15 de julio de 1997, Gianni Versace había salido a comprar revistas a un local cercano a su mansión. Cuando regresó, metió la llave en la cerradura de Casa Casuarina y antes de abrir el enorme portón de su residencia miamense, Andrew Cunanan le pegó los dos tiros. El diseñador llevaba en sus manos el semanario People y la revista Vogue.
En la tapa de la publicación de Condé Nast, que descansaba junto a su cuerpo al lado de un charco de sangre, se podía leer: “Buenas noticias para las piernas fea: cómo mejorar lo que la naturaleza te ha dado”.
Al día siguiente, el 16 de julio, se celebró un funeral judío a ataúd abierto. Un día después, sus restos fueron incinerados y llevados por su hermana Donatella a la finca familiar en Milán. Algunas de sus musas, Naomi Campbell y la luego ex primera dama francesa, Carla Bruni, también lo despidieron.
"Siempre recordándote, Gianni Versace. Tus creaciones siguen siendo tan relevantes hoy como por entonces. Permanecés en mi corazón", escribió en memoria del diseñador su amiga Naomi Campbell.
Andrew Cunanan: un asesino serial con aires de grandeza
Andrew Cunanan fue el asesino serial que terminó con la vida del diseñador el 15 de julio de 1997 tras dispararle dos tiros en la puerta de Casa Casuarina, su residencia en Miami Beach. Nacido en National City (California) y el menor de cuatro hermanos de una familia ultra conservadora, Cunanan era hijo de un fraudulento corredor de bolsa y una fanática religiosa. Marcado por delirios de grandeza y obsesionado por tener status social, mintió infinidad de veces acerca de su identidad –dijo desde que era un millonario israelí a un aristócrata neoyorkino– vendió su cuerpo –“era un prostituto de lujo”, dijo su madre– y traficó con drogas.
Además de asesinar a Versace, Cunanan también terminó con la vida de cuatro personas más, entre ellas el empresario inmobiliario Lee Miglin, en Chicago. “Killing Versace: The Hunt From a Serial Killer” (estrenada por E! Entertainment el 13 de julio) es un acercamiento a la mente del asesino quien, en palabras de especialistas forenses y legales, es “un verdadero psicópata”. “No es mejor que yo o igual, la única diferencia es que tuvo suerte”, dijo el asesino respecto de la fama del diseñador. Ocho días después se dispararle, el 23 de julio, se suicidó de un tiro en la boca con la misma arma con la que lo había matado.
La miniserie que primero contó su muerte
The assesination of Gianni Versace: American Crime Story (El asesinato de Gianni Versace: Un historia de crimen americano, Netflix, 2018) fue la primera ficción en revivir la muerte del diseñador. Ganó siete premios Emmy y dos Globo de Oro, incluidos a la mejor miniserie y a Mejor actor principal en una miniserie (Edgar Ramírez).
Según rememoró Donato de Santis, quien estuvo el día del crimen, “se muestra a Antonio (Ricky Martin) que abraza el cuerpo de Gianni y su camisa se mancha por completo de sangre. La verdad es que Antonio D'Amico (novio de Gianni), después de oír los disparos, lo vio agonizando y entró a la casa desesperado, a pedir ayuda”. Para la familia Versace, “sólo se trata de un trabajo de ficción”.
En 2018, la ex pareja del diseñador dio declaraciones acerca de la naturaleza ficticia de American Crime Story y aclaró que la escena en la que Donatella (Penélope Cruz) se queja de él por no haberle dado hijos al diseñador, es falsa. "Ni Gianni ni yo estábamos buscando casarnos o tener hijos. Todo lo que queríamos era vivir nuestra relación abiertamente, como lo hicimos. Estábamos más que felices de tener sobrinas y sobrinos", explicó D'Amico.
Donato De Santis, su cocinero: “Tuve que reconocer su cuerpo”
Cuando mataron a Versace, quien lo deleitaba en la cocina desde hacía cuatro años –y con platos como chauchas cocinadas en aceite de almendras y ralladura de limón, acompañadas por un lenguado pasado por harina de polenta– era Donato de Santis. El día en el que Cunanan asesinó a Versace, el cocinero argentino tuvo que reconocer el cuerpo, declarar ante el FBI y cocinar en su honor para los hermanos del diseñador, Donatella y Santo.
Así recuerda al diseñador a quien conoció en el restaurante Bice, de Palm Beach, en 1992: “Siempre fue muy respetuoso. Era una persona muy introvertida, reservada y semi distante. Después, cuando empezabas a hablar, por ahí te invitaba a sentarse a tomar una copa de vino”. Acerca de ese fatídico 15 de julio, De Santis rememora: “Como nadie de su familia había llegado al Jackson Memorial, me tuve que hacer cargo de todo. ¡Sólo me faltó llamar al presidente Clinton! Ellos llegaron cerca de las dos de la mañana y sólo pudieron ver el cuerpo a través de un vidrio”.
Fotos: archivo Atlántida y gentileza E! Entertainment.