Cacho Fontana, el protagonista de la primera edición de Revista GENTE – GENTE Online
 

Cacho Fontana, el protagonista de la primera edición de Revista GENTE

En su primera nota con este medio, publicada el 29 de julio de 1965, el locutor confesó que quería trabajar dos años más frente a los micrófonos y después tenía como objetivo concentrarse en estas detrás de escena.

El 29 de julio de 1965 no fue un día más para los medios argentinos. Salía por primera vez GENTE con Cacho Fontana, el legendario locutor que murió este martes a los 90 años, en su portada.

“Jorge Cacho Fontana se sincera con GENTE como si fuera el muchacho común Norberto Paleso”, decía el título elegido (haciendo referencia a su nombre de pila) para esta portada en donde lo lo podía ver sonriente y de perfil.

Cacho estaba en la cresta de la ola, representando un personaje ideal para el lanzamiento de un medio que sin dudas se metió en los hogares argentinos rápidamente.

En el texto, el periodista Julio Lagos, autor de esta entrevista histórica, lo presentó como el protagonista de la "la historia de un triunfador, un locutor de radio que llega a ser famoso y millonario, y que no olvida ni a sus amigos ni su porteñisimo modo de ser y hablar".

En la entrevista, Cacho recordó que su primera novia la tuvo a los 14 años y que cuando era adolescente soñaba con ser contador. Pero la vida lo llevó por un camino que no esperaba, convirtiéndose en un gran locutor.

“Un locutor tiene que tener una condición difícil: personalidad. Para mi el mejor es Antonio Carrizo porque es quizá el más completo. Aparte, creció con una gran personalidad y rompió estilos que se entendían como tradicionales”, afirmó Fontana por aquel entonces.

Cuando Julio Lagos le preguntó por cuánto tiempo pensaba ser locutor, confió: “No sé… quiero hacer mi propio programa de televisión, y luego, dentro de dos o tres años no dar más la cara. Ser productor, estar detrás, que es un modo de tener algún fin de semana libre o de poder comer con amigos…. Creo que puedo ser útil. Porque, al fin de cuentas, ayuda mucho saber que somos y para qué estamos”, detalló.

Más allá de esta reflexión lanzada en 1965, la historia es pública. No lo puedo concretar y le dio al medio una presencia contante delante de los micrófonos, poniendo su impronta única, y también siguiendo cada detalle desde el lado de la producción. Un verdadero talento de los que ya no abundan.

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