Si bien para el sábado 6 de mayo aún hay un largo trecho, la cuenta regresiva para la coronación de Carlos III y Camila Parker-Bowles está en marcha. En el mientras tanto se van conociendo algunos detalles que no dejan de sorprender.
“La elección de la corona de la reina María por Su Majestad [Camilla] supone la primera vez en la historia reciente que una corona ya existente sea usada para la coronación de una reina consorte en lugar de fabricar una nueva”, explicaron desde la Casa Real británica.
Todo se trata de seguir bajo la idea de “sostenibilidad y eficiencia” que tanto pregona su esposo, heredero del trono. Este detalle es histórico debido a que la única reina consorte que usó una corona existente fue la reina Carolina.
En este caso en particular, los cambios que se le están haciendo a la corona son añadirle algunos detalles de joyería con el objetivo de homanajear a la fallecida reina Isabel II.
“La corona será renovada con los diamantes Cullinan III, IV y V, pertenecientes a la colección personal de la reina Isabel II y usados por la difunta monarca como broches durante muchos años”, añadieron en un comunicado.
De esta forma, esos diamantes van a sustituir al controvertido diamante Koh-I-Noor que había sido usada por quienes la precedieron y que fue cuestionada por India debido a su origen.
“Cuatro de los ocho arcos removibles de la corona se quitarán para dar una impresión diferente a cuando fue llevada por la reina María en la coronación de 1911”, comunicaron.