La influencer Julieta Poggio es una de las participantes que ingresó al reality estando en pareja. Si bien sus redes y las de su pareja demuestran el amor que ambos tienen, el público considera que ella debería comenzar una relación con su compañero Marcos Ginocchio.
Ya a semanas de terminar el reality, el vínculo amoroso entre ellos no pudo concretarse, de hecho, solo quedó como una amistad. Aunque siempre termina habiendo roces, como en este caso, en el que la influencer le preguntó a Marcos si estaría con alguien de la casa fuera del programa.
"¿Alguna otra persona estaría con alguien de la casa?, ¿Primo?", le consultó la modelo a su compañero, que sin dudarlo señaló que No. De hecho trató de no involucrarse más en el tema, mientras el resto de las participantes continuaron respondiendo preguntas entre ellos por el 14 de febrero.
Romina es la líder de la casa esta semana
Esta semana, la casa de Gran Hermano esta atravesando una nueva etapa luego de la eliminación de uno de sus jugadores más polémicos Walter "Alfa" Santiago y el ingreso de dos perritos, Moro y Caramelo. Además, este martes en la primera parte de la esperada prueba del líder hubo novedades: la final se resolvió entre dos mujeres. Romina y La Tora fueron las finalistas que compitieron por el liderazgo de la semana de Gran Hermano.
Luego de un mano a mano muy intenso con Lucila, Romina una vez más se convirtió en líder de la semana. Tendrá inmunidad y la potestad de salvar a uno de los nominados. Al ingresar a la casa, el conductor le pidió a la exdiputada que se colocara al lado del televisor y le dijo que mirara a sus compañeros ya que de ella dependía la placa de esta semana.
"Estoy impresionada con las mujeres, las chicas están muy fuertes, con mucha paciencia y concentración. Acá era posible que una pusiera en placa a la otra, así que quien gane esta prueba será fundamental para la gala de nominación”, destacó la panelista del programa, Laura Ubfal, luego de ver el desempeño de las chicas durante la prueba.
La prueba del líder en esta ocasión se basó en estrategia y equilibrio, las jugadoras tenían que caminar por una barra de metal hacia una plataforma levadiza, allí tenían que colocar una serie de cubos apilados y luego levantarlos para mantener el equilibrio. Para poder realizar esta prueba Gran Hermano decidió innovar y puso un timer, dándoles 15 minutos para realizarla. La que ganaba era la que más cubos ponía en la plataforma.