Un joven pintor italiano, Giovanni Guida, 30 años, se ha hecho famoso y ha entrado en los libros de texto de historia del arte, en las enciclopedias y diccionarios del mundo por la originalidad de su técnica pictórica del grattage, que consiste en "raspar" con instrumentos puntiagudos de varios tipos el pigmento cromático, dejando emerger el color de fondo subyacente.
Este proceso de pintura fue inventado hace 96 años por alemán Max Ernst. Posteriormente también fue utilizado por otros artistas, como Remedios Varo (pintora española que vinculó para siempre la magia al arte).
Giovanni Guida nació en Acerra (Nápoles) en octubre de 1992. Se licenció con honores en Pintura en la "Real Academia de Dibujo", la Academia de Bellas Artes de Nápoles. En este lugar comenzó a experimentar con las técnicas del automatismo psíquico, como el frotamiento (frottage) y el raspado de la pintura sobre el lienzo. Sus pinturas se caracterizan por la profundidad del noble azul del lapislázuli del Medio Oriente, que cuenta la historia de la ciudad de Nápoles, su maravilloso mar, su golfo, su cielo, la bandera del club de fútbol Napoli (cuyos jugadores se definen como “azules”).
En cuanto al motivo que llevó a la elección de este color, desde el primer debut futbolístico, es de carácter histórico y hace referencia a la heráldica de la dinastía Borbón. Con el paso de los años este vínculo no se ha debilitado, al contrario, ha evolucionado y fortalecido con la llegada, en los años 80, de Diego Armando Maradona, futbolista, entrenador de fútbol y director deportivo argentino. Hay un parecido con el blanco-azul de la bandera y las camisetas de Argentina, la tierra de Maradona.
El blue llega a Sudamérica tras la dominación española. Detrás de los colores de la bandera nacional que Argentina luce desde 1812 se entrelazan historias políticas, religiosas y artísticas. La unión entre la camiseta albiceleste y la nación que se proclamó campeona del mundo es inseparable.
En 1771, Carlos III de Borbón -soberano particularmente devoto del culto mariano (el color asociado a la Virgen María es, de hecho, el azul, que simboliza la elevación de la Virgen con respecto a la condición humana), habiendo reinado también en Nápoles, fundó, para celebrar el nacimiento de su hijo, la Orden de Carlos III, eligiendo como colores el blanco y el azul (los colores de la bandera de Argentina).
La banda de la Orden fue usada por súbditos leales en el Nuevo Mundo contra los revolucionarios bonapartistas. Los realistas tenían la banda, los revolucionarios eligieron la escarapela que en Argentina, sin embargo, mantuvo el blanco y el azul.
A finales del siglo XIX, los ingleses trajeron el fútbol in Argentina. Cuando la Selección debutó contra Uruguay en 1902, vestía una camiseta totalmente azul. La elección del blanco, sin embargo, no sorprende: siempre ha sido un símbolo de honestidad y pureza.
En sus obras Giovanni Guida también utiliza el oro (que recuerda la alianza entre el Absoluto y el hombre, la "metafísica de la luz", la incorruptibilidad y la eternidad del arte) y plata (que evoca las preciosas esculturas de los orfebres medievales y renacentistas).
Otra conexión obvia: el nombre “Argentina” deriva del latín "argentum" (plata). Cuando los primeros conquistadores españoles descubrieron el Río de la Plata quedaron asombrados por sus reflejos plateados y algunos ricos hallazgos y llamaron a su estuario Mar Dulce. Los indígenas ofrecieron obsequios de plata a los sobrevivientes de un naufragio liderado por Juan Díaz de Solís.
Lo cierto es que Guida perfora la piel del cuadro, valiéndose de instrumentos punzantes, como bisturíes, peines de hierro, bloques de metal, estiletes y redes de acero, para liberar el color, devolverle su brillo original y desgarrar el “velo de Maya” que cubre la esencia de las cosas, llegando a una especie de trascendencia espiritual… Esta acción recuerda el famoso rasgado del velo del templo de Jerusalén, que tuvo lugar desde arriba (trascendencia) hacia abajo (inmanencia).
En 2018 su icono Caesarius Diaconus (Cesáreo de Terracina fue protector de los emperadores romanos) se exhibe en muchos museos de todo el mundo. En 2020 se viraliza en la red su obra "Y tú sanarás de todas las enfermedades... y yo, yo te cuidaré", que representa al Creador que desmaterializa la estructura molecular del coronavirus en el mundo.
La curación se presenta como el reencuentro definitivo con el Absoluto, para quienes se saben su reflejo y el resultado de un proyecto cósmico por cumplir. En 2023 creó la obra Copula mundo (Sol naciente), que significa literalmente "vínculo o unificación del mundo": el alma humana está situada -como el sol- en el centro del universo, mediador entre Dios y el creado, entre espiritualidad y corporeidad.
Sí, el mismo sol que luce en su centro la bandera argentina.
(*) Mario Bove nació en 1951 en Nápoles. Graduado en Historia moderna y contemporánea en la Universidad de Montecassino, fue docente en escuelas secundarias de Roma, Bagnoregio, Frascati y Nápoles
