Al cumplirse el décimo aniversario de la muerte de Amy Winehouse (1983-2011), la icónica y controversial cantante británica que elevó elevó al soul a la popularidad, su voz aún queda en el recuerdo. En Spotify, por caso, tiene 10.483.000 oyentes mensuales.
En coincidencia con aquel trágico 23 de julio de 2011, cuando falleció a los 27 años en su casa del barrio londinense de Camdem por una intoxicación etílica tras un largo historial con el consumo de drogas y alcohol, su familia prepara un documental que pretende reivindicarla.
Reivindicando a Amy, su nuevo documental
Janis Winehouse-Collins, la madre de Amy, es la responsable de Reclaiming Amy (Reivindicando a Amy), un nuevo documental sobre la artista que incluirá imágenes inéditas y entrevistas con los amigos que la conocían muy bien y su íntimo círculo familiar.
En entrevista con Mark Savage, de BBC, su madre y su padre, Mitch, contaron que la idea es recuperar la imagen de su hija. Luego de que Amy recibiera un trato "ácido" por parte de la prensa, especialmente de los tabloides ingleses que se hicieron un festín con su atribulada vida, su familia quiere mostrar otros aspectos de la cantante.
"Lo que estamos tratando de lograr es una imagen más completa de Amy", explicó Mitch sobre la artista a quien la prensa mundial coincidió en elogiar de modo unánime por su frescura, su estilo inconfundible y la sagacidad de sus letras.
Su segundo álbum de estudio, Back to Black (2006), con canciones icónicas como You know I'm No Good –que trata sobre su histórica resistencia a internarse para someterse a rehab– la consagró mundialmente.
Los escándalos de Amy: marihuana, alcohol y drogas duras
Su vida plagada de excesos fue retratada sin cansancio por la prensa mundial, que insistió en mostrarla en fotos en las que se la veía deteriorada, desalineada, consumiendo alcohol, lastimada, desnuda, en poses comprometedoras junto a su esposo Blake Fielder-Civil y hasta en explícitas tomas en las que consumía cocaína.
Por caso, en agosto de 2007, el diario británico Daily Mail publicó imágenes en las que se la veía ensangrentada luego de una pelea con su pareja. Por ese entonces, Winehouse aclaraba: "Me estaba haciendo cortaduras a mí misma después de que él me encontró en nuestra habitación a punto de drogarme... y con toda razón dijo que yo no era suficientemente buena para él".
En septiembre de ese mismo año, Winehouse llegó sin un diente a la entrega de los Premios Mobo en Londres. Según contó –y siempre con la franqueza que la caracterizaba–, la pérdida de la pieza se dio al caerse durante una noche de borrachera. En esa fecha debió cancelar seis conciertos para someterse a una cirugía dental.
Otro de sus escándalos fue ese mismo año cuando en Zúrich, Suiza, durante un show fue captada drogándose. En las imágenes registradas se la pudo ver sacar algo de su cabello –siempre peinado en su exótico y clásico rodete alto estilo nido– y consumirlo con disimulo. Esa vez no fue la única que fuera descubierta presa de su adicción.
En octubre de 2007 fue detenida en Noruega por posesión y consumo de marihuana. La cantante y su marido fueron detenidos tras encontrarles 7 gramos de cannabis. Además de pasar varias horas en prisión, Winehouse debió pagar una multa de 500 euros.
En 2008, The Sun filtró un video en que el Amy consume un cóctel de éxtasis durante una fiesta en su departamento londinense. En ese material, de 19 minutos de duración, la compositora aparece consumiendo cocaína y crack en una pipa.
Justamente este malicioso y machacante enfoque sobre sus adicciones que recibió por parte de la prensa es lo que su familia quiere desterrar para centrarse en su poder compositivo, sus pasiones y para que se la recuerde por su talento sin igual.