La activista ecológica Greta Thunberg (17) podría llevarse el Nobel de la Paz, para el cual la nominaron este año por segunda vez. Su lucha contra el cambio climático junto al movimiento Fridays for Future tiene amplias chances de ganar el galardón ya que, según expertos, resalta el vínculo entre el daño ambiental y la amenaza a la paz y la seguridad, sobre todo en tiempos de Covid-19.
El ganador del premio de un millón de dólares se anunciará en Oslo el 9 de octubre y resultará de una lista de 318 candidatos, en la que también se encuentra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Nominada por tres legisladores noruegos y dos parlamentarios suecos, la joven de 17 años nacida en Estocolmo sería la segunda más joven de la historia –junto a Malala Yousafzai– en recibir el premio entregado por primera vez en 1901.
Siempre comprometida con la causa contra el cambio climático, Thunberg no baja los brazos. Hoy compartió su consternación por "los ecosistemas intactos del tamaño de México que se perdieron en todo el mundo en sólo 13 años" y cómo esas pérdidas podrían tener profundas implicancias en la biodiversidad.
"Ni una sola persona ha hecho más que ella para que el mundo se concentre en el cambio climático”, dijo la historiadora Asle Sveen a Reuters. Según Sveen, sería una fuerte candidata para el premio este año ya que su tarea, con noticias como los incendios forestales de la Costa Oeste de Estados Unidos, por ejemplo, "dejó a la gente sin dudas sobre el calentamiento global".
Entre otros galardones, el comité ya entregó otros premios a ambientalistas, tales como Wangari Maathai, de Kenia, en 2004, por su campaña para plantar 30 millones de árboles en África, y al ex vicepresidente estadounidense Al Gore, en 2007.
"Es probable que el Comité opte por resaltar la amenaza de las pandemias para la paz y la seguridad", dijo Dan Smith, director del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo.
Por otra parte, la postulación de Trump sigue generando un amplio debate. Mientras los premios Nobel contribuyen a resaltar la vida de luchadores por la paz como los otorgados a Nelson Mandela, María Teresa de Calcuta y el argentino Adolfo Pérez Esquivel, los expertos remarcan que sería una contradicción que lo ganara alguien muchas veces acusado de racista y con una postura belicista y proisraelí en el conflicto de Medio Oriente.
"La postulación de Trump es un disparate impulsado por un fascista noruego. Paradójicamente, los países nórdicos que tienen sociedades democráticas generan este tipo de personajes", opinó Norberto Consani, director del Instituto de Relaciones Internacionales (IRI), dependiente de la Universidad Nacional de La Plata, en diálogo con Télam.
"Propusimos a Greta Thunberg porque el cambio climático, si no lo frenamos, será la principal causa de las guerras, los conflictos y el flujo de refugiados que vendrán", había dicho a AFP el diputado noruego Freddy André Øvstegård, uno de quienes postularon a la activista.
Greta se convirtió en un símbolo de la lucha contra el cambio climático el año pasado, tras convocar una huelga mundial de estudiantes para pedir acciones eficaces para atender "una crisis existencial ignorada durante décadas".