El avance tecnológico es uno de los factores claves en empresas dedicadas a la producción, al diseño y al desarrollo de automóviles. Santa Isabel, la planta cordobesa de Renault que es una insignia en vanguardia y maquinaria, basa su modelo laboral en la incorporación y mantención del capital humano de la planta. Hay hasta tres generaciones de una misma familia que pasaron por el sitio: “Trabajar para el rubro es un gran orgullo y un sentido de pertenencia a la empresa”, explican los operarios durante una entrevista con Gente.
La planta de Santa Isabel a la que accedió Gente es considerada una central automotriz modelo en la región. En los 67 años de existencia de Santa Isabel se fabricaron 3.2 millones de autos: de esa planta, por ejemplo, salió el papamóvil y modelos icónicos de la compañía como la coupé Fuego, el Torino y el Clio.
El capital humano es uno de los principales valores que se priorizan en la fábrica fundada en 1954. De todas las historias de vida que contempla Santa Isabel se destaca la de Felix Berruezo, que actualmente se desempeña como gerente del departamento de soldadura. “Tenía 20 años cuando ingresé y me traía mi padre y veníamos en el mismo ómnibus. Y ahora la historia con ella básicamente se repite (N. de la R: en alusión a su hija), porque ella viene conmigo en el auto”, comentó.
Gente: ¿Qué te genera la idea de seguir el legado familiar de trabajo en Renault?
Fátima Berruezo: Tengo 23 años y soy operaria de montaje. Es una misión. Soy la primera mujer de la familia. Primero estuvo mi abuelo, después mi papá y ahora yo. Siempre lo quise hacer y siempre lo pedí hasta que entré. El recuerdo que más presente tengo es cuando él volvía del trabajo y yo volvía de estudiar y nos juntábamos a merendar o en la cena y él siempre estaba con el uniforme puesto.
Ángel Guillermo Ledesma tiene 55 años y es operador senior en matricería. Comenzó a trabajar en la planta en 1985. Sobre cómo es pasar tanto tiempo en un mismo lugar de trabajo asegura: “Es una vida porque yo entré con 18 años, ahora tengo 55. Pasé toda la etapa desde la adolescencia, juventud y ahora soy un hombre ya grande. Me casé, tuve tres hijos, gracias a Renault les di estudio. Es importante la empresa. Lo que más se destaca es el trabajo en equipo. Es decir, sentirse apoyado por el gran equipo que pasa a ser una familia”.
El mejor trabajo del mundo según Edgar Rodríguez
Edgar Rodríguez se desempeña como gerente JT de montaje VU. Cuando empezó a trabajar en Renault cumplió el sueño que anhelaba desde que era chico: probar los vehículos en su fase de 0 kilómetros. El trabajo en la planta de Santa Isabel fue el primero en la vida de Rodríguez.
“A mí Renault me dio muchas oportunidades de desarrollo personal y profesional. Siempre de chiquito decía 'Uh, qué bueno hacer la prueba de los vehículos 0 kilómetros' y mi primer puesto cuando entré fue la pista de pruebas, así que es algo que siempre me quedó anecdótico'”, expresó. Click acá para más información sobre Renault.