La marca sueca Volvo implementó en toda Europa su tecnología de seguridad conectada a través de la cual los vehículos de la marca pueden comunicarse entre sí y advertirse de peligros en la carretera mediante una red basada en la nube.
Los modelos de Volvo emplean los sistemas de alerta de peligro (Hazard Light Alert) y carretera resbaladiza (Slippery Road Alert), que se introdujeron por primera vez en 2016 en Suecia y Noruega y que ya son de serie.
“Compartir datos de seguridad en tiempo real entre automóviles puede ayudar a evitar accidentes”, señaló Malin Ekholm, director del centro de seguridad de Volvo Cars.
“Los propietarios de coches Volvo contribuyen directamente a hacer que las carreteras sean más seguras para otros conductores, mientras que también se benefician de alertas sobre condiciones potencialmente peligrosas”, agregó el ejecutivo.
La firma sueca ha invitado todas las marcas de automóviles a compartir datos anónimos relacionados con la seguridad del tráfico. “Cuantos más vehículos compartan datos de seguridad en tiempo real, más seguras serán nuestras carreteras. Esperamos establecer más colaboraciones con socios que compartan nuestro compromiso con la seguridad”, subrayó Ekholm.
Además, Volvo limita la velocidad máxima de todos sus vehículos a 180 km/h e incorporará cámaras y sensores que detectarán cuando el conductor está bajo los efectos del alcohol y las drogas y también evitarán distracciones, con el objetivo de reducir a cero los accidentes de tráfico.
