Volkswagen anunció que instalará en Carolina del Sur (Estados Unidos) una fábrica para producir los vehículos eléctricos de la marca Scout Motors, que el grupo alemán adquirió en 2021. Se espera que la planta comience a producir los primeros modelos, una pick-up y un SUV, en 2026.
La historia de la Scout se remonta a la década de 1960 cuando International Harvester, hoy conocida como Navistar International Corporation, comenzó a desarrollarse.
Según Navistar, el Scout fue “comercializado como un vehículo recreativo familiar todo terreno” antes de convertirse en un “verdadero SUV”. La producción del Scout cesó en 1980. Hoy Navistar es parte del Grupo Traton, que a su vez es una subsidiaria del Grupo Volkswagen.
Tras confirmar el año pasado el inicio de las operaciones de Scout ahora el Consejo de Administración de VW anunció que la emblemática marca tendrá su planta de ensamblaje tras una inversión de 2.000 millones de dólares.
La nueva planta de vehículos eléctricos Scout creará alrededor de 4.000 empleos y podrá fabricar más de 200.000 vehículos al año cuando esté totalmente operativa.
VW actualmente opera una fábrica en los Estados Unidos, en Chattanooga, Tennessee. Desde julio de 2022 produce allí el ID.4. El fabricante alemán también puso en marcha un laboratorio de ingeniería de baterías en Chattanooga el año pasado y ha dicho que tiene la intención de “desarrollar” la producción de celdas de batería en ese país.
La nueva planta de Scout se ajusta a otros compromisos que VW asumió como parte del anuncio de 7.100 millones de dólares de mayo pasado. En ese momento, VW dijo que lanzaría no solo el ID.4 ensamblado en Estados Unidos en 2022, sino también el ID. Buzz en 2024 y “nuevos SUV eléctricos a partir de 2026”.