Con la colaboración del piloto francés Romain Grosjean, que tuvo su paso por la Fórmula 1, la marca checa Praga creó el Praga Bohema. Se trata de un hypercar legal para carretera con motor central que en manos adecuadas puede lograr en un circuito tiempos de vuelta similares a los de un GT3.
El Bohema se destaca por tener un monocasco de fibra de carbono, una suspensión completamente ajustable y un potente motor biturbo de seis cilindros derivado del Nissan GT-R que eroga 700 CV. La transmisión semiautomática permite una experiencia única en carretera y la pista.
“Me quedé asombrado por el increíble rendimiento de Bohema en la pista, su accesibilidad en la carretera y la facilidad de transición entre los dos. ¡Praga realmente cumplió con mi desafío!”, resumió Grosjean, que estuvo tan involucrado en el proyecto que participó en su desarrollo en la pista.
El hypercar fue perfeccionado en el túnel de viento de un equipo de Fórmula 1. Su aerodinámica y su mecánica le permiten alcanzar los 300 km/h en cualquier circuito.
El Praga Bohema seguirá con su desarrollo en Reino Unido, Europa y Medio Oriente; mientras que su producción comenzará en 2023 y estará limitada a diez unidades. El fabricante confirmó que el precio es de 1,31 millones de dólares más impuestos.