En un mundo automotriz saturado de tecnología avanzada y electrificación, Nilu27 irrumpe con una propuesta radical. La marca de hypercars, fundada por el diseñador Sasha Selipanov, ha presentado su primer vehículo: el NILU, un vehículo que promete una experiencia de conducción cruda y sin filtros, desafiando las tendencias actuales del mercado.
El NILU se distancia deliberadamente de las soluciones tecnológicas modernas. Sin electrificación ni digitalización, este hypercar se basa en una estética que recuerda a los autos de Fórmula 1 de los años 60, los coches de Le Mans, y el diseño clásico italiano. Su diseño ecléctico y audaz está inspirado en el Bauhaus, el músculo americano, los autos de drift, la matemática y la música metal avant-garde.
El exterior del NILU, con sus secciones transversales ajustadas y curvas sinuosas, es funcional y aerodinámico. La filosofía Bauhaus se refleja en la ausencia de elementos decorativos superfluos, celebrando una belleza esencialmente funcional. El contraste entre las superficies limpias y escultóricas y el compartimiento del motor expuesto es notable.
El chasis del NILU está construido con un monocasco de fibra de carbono y subestructuras tubulares de aleación de aluminio, una elección deliberada para mejorar el acceso a los componentes del tren motriz y facilitar la extracción del calor. Esta decisión también celebra la estética mecánica del vehículo.
Dentro de la cabina, el diseño se centra en proporcionar ángulos de visión perfectos y ergonomía ideal. El techo bajo y las dimensiones compactas de la cabina no comprometen la comodidad. El NILU aloja a dos adultos en una disposición tradicional uno al lado del otro, con puertas tipo alas de gaviota que facilitan el acceso y egreso sin obstrucciones.
La interfaz del NILU es puramente analógica. El único elemento digital es una cámara de visión trasera que soluciona la visibilidad limitada característica de los autos deportivos con motor central. El volante compacto y redondo ofrece una precisión detallada en la dirección, sin botones ni interruptores que distraigan al conductor. La transmisión manual de siete velocidades y otros ajustes, como el volante y los espejos, se controlan manualmente, brindando una experiencia de conducción inmersiva y sin distracciones.
En el corazón del NILU se encuentra un motor V12 de 6.5 litros, diseñado en colaboración con Hartley Engines en Nueva Zelanda. Este motor atmosférico no solo es uno de los más potentes del mundo, con más de 1.000 caballos de fuerza, sino que también presenta una configuración “Hot V” única que mejora la extracción de calor y la estética del diseño.
El NILU tendrá una producción muy limitada de 15 unidades por Aria Group en Irvine, California, con planes de aumentar las instalaciones de producción en el extranjero. Además, se está desarrollando una versión homologada para la calle, limitada a 54 unidades, con cuatro diseños únicos.