El Women's World Car of the Year (WWCOTY), un movimiento formado por 50 mujeres periodistas especializadas en la industria automotriz procedentes de 38 países de los cinco continentes, promueve el 24 de junio como Día Internacional de la Mujer Conductora. El objetivo es llamar la atención sobre la importancia de la mujer en el mundo del automóvil.
Cerca del 50% de los nuevos carnés de conducir se expiden a nombre de mujeres en los países con mayor nivel de vida. En España, el 42% del total de licencias están en manos de mujeres, lo mismo que en Alemania; en la República Checa sube al 48%; en Canadá y Nueva Zelanda, al 49%; en Israel está en un 45%, y en Argentina un 27%.
En algunos países, como Estados Unidos, el 62% de las nuevas adquisiciones de vehículos son realizadas por mujeres. Con las ventas de automóviles en uno de sus peores momentos, las mujeres conductoras pueden ser la salvación de las marcas.
¿Pero por qué se elige al 24 de junio para conmemorar al Día Internacional de la Mujer Conductora? Es que el 24 de junio de 2018 se derribó la última barrera que existía en el mundo para las mujeres que deseaban ponerse a los mandos de un coche. Ese día Arabia Saudita levantó la prohibición de conducir a las mujeres (video) y así se eliminó el último escollo para la movilidad de la mujer en todo el mundo.
El WWCOTY quiere este año que las mujeres vuelvan a recuperar el protagonismo que tuvieron en los inicios de la historia del automóvil.
Los retrovisores no existirían si Dorothy Levitt si en 1909 no hubiera utilizado el espejo de su polvera para ver los coches que la seguían; las carreteras tampoco tendrían líneas divisorias si en 1917 la médica June McCarroll no se hubiera obsesionado con reducir la mortalidad vial.
Todos tendríamos que llevar mantas a bordo de no ser porque a Margaret Wilcox se le ocurrió desarrollar en 1893 un sistema de calefacción para el automóvil; y la siniestralidad sería mucho mayor si la actriz Florence Lawrence no hubiera diseñado en 1921 las primeras luces intermitentes.
Por supuesto, la primera persona que se puso a los mandos de un coche tenía un nombre femenino, Bertha Benz, quien en 1888 probó con éxito el vehículo que había creado su marido, Karl Benz.