En los últimos años, los juegos Escape Room han ganado en popularidad, enfrentando a equipos de jugadores contra el reloj mientras intentan resolver pistas y escapar de una habitación temática. Ahora, Ford ha tomado ese concepto y lo ha aplicado al Mustang Mach-E totalmente eléctrico, con el juego controlando elementos del coche para crear una experiencia interactiva.
El concepto de juego con temática de espías lleva a los jugadores a través de una misión secreta para entregar un paquete. Los asientos eléctricos, el portón trasero de manos libres, el sistema de aire acondicionado y los faros delanteros son algunos de los elementos que se activan con el juego o que el jugador utiliza como disparador en los puntos pertinentes.
Si el coche está en movimiento, no se controla ningún elemento aparte de la calefacción y los altavoces y, a diferencia de los juegos de Escape Room, los jugadores pueden salir del vehículo en cualquier momento, cuando sea seguro hacerlo, sin perder la partida. El juego se instala en un dispositivo iOS que se interconecta con el vehículo mediante CarPlay de Apple y una pieza de hardware y software desarrollada internamente.
“Esto es un poco de diversión que tiene un lado serio, ya que muestra lo que podría ser posible con la tecnología que tenemos en los coches hoy en día”, explica Carsten Starke, experto técnico en Materiales Interiores y Experiencia del Cliente en el departamento Ford Research & Advanced Engineering de Ford Europa.
“Tener la capacidad de crear una interacción entre el vehículo y el conductor podría abrir nuevas vías para explorar otras posibilidades en el futuro, como un manual del propietario interactivo o incluso el entrenamiento del conductor”.
El juego es por el momento un mero prototipo, desarrollado por Ford Europa con la colaboración del equipo de Investigación y Habilitación de Software del grupo de Tecnología Emergente e Innovación de Ford y el grupo de IOT con sede en Palo Alto, California. Se ha desarrollado para mostrar cómo la gamificación puede ayudar a las personas a familiarizarse con las funcionalidades de sus vehículos.
Incluso podría ofrecer un vistazo al futuro de las aplicaciones que podrían entretener o educar a los conductores y pasajeros durante el tiempo de inactividad en las estaciones de carga, o tal vez incluso mientras viajan en los futuros vehículos autónomos.