Mitsuoka es una compañía japonesa especializada en la creación de coches de aspecto peculiar que toman como inspiración modelos clásicos. Fundada en los años 60, ha desarrollado una amplia gama de vehículos basados en modelos convencionales. Tal es el caso del Mitsuoka Viewt Story, que ha estado en el mercado desde 1993 y siempre ha estado basado en el Nissan Micra/March. Sin embargo, la última versión ha sido diseñada sobre la base del Toyota Yaris.
El Yaris ya vive una doble vida, ya que es un Mazda2 híbrido con el emblema de Toyota en varios mercados y ahora en Japón tiene una tercera personalidad. Mitsuoka ha vendido más de 13.000 unidades del modelo Viewt basado en el Micra y espera tener el mismo éxito con esta cuarta generación del Viewt que continúa la tradición de adoptar elementos de estilo del Jaguar Mark 2.
La nueva versión del Yaris tiene una parrilla vertical grande y faros redondos en la parte delantera, como un homenaje al lujoso sedán británico de los años 60. El coche es 70 mm más largo que el modelo original y tiene ruedas de acero pequeñas con tapacubos cromados. Conocido por su nombre completo como Mitsuoka Viewt Story, se le han añadido luces traseras redondas para distinguirlo de las tres generaciones anteriores que imitaban las luces traseras del Jaguar Mark 2.
Mientras que por fuera es difícil distinguir que se trata de un Toyota Yaris, su verdadera identidad se nota en el interior, donde los cambios son menos significativos. Mitsuoka ha renovado la tapicería y los colores de los acabados, pero el diseño general sigue siendo el mismo. El emblema de Toyota en el volante ha sido reemplazado por el logotipo del carrocero.
Este no es el primer modelo de Toyota que recibe el tratamiento de Mitsuoka. También ha creado el Ryugi, Galue y Nouera, todos basados en variantes del Corolla.
El Mitsuoka Viewt Story combina la confiabilidad de Toyota con el estilo único de Mitsuoka. Es una opción interesante para aquellos que buscan un coche que se destaque de la multitud, con un toque de nostalgia por los coches clásicos. Con precios que superan los 23.000 dólares, el modelo cuesta más del doble que el Yaris convencional, pero su diseño y exclusividad pueden ser suficientes para atraer a los compradores más exigentes.
