La icónica marca francesa Bugatti, que es sinónimo de lujo y prestigio, ha redefinido los límites del rendimiento automotriz con el impresionante Bugatti Bolide. Presentado en 2020, este vehículo representa la culminación de la ingeniería y la innovación, llevando la velocidad y la exclusividad a un nuevo nivel.
El Bugatti Bolide, que sólo se puede utilizar en circuitos, es una declaración audaz de ingeniería y rendimiento. Basado en el legendario Chiron, el Bolide ha experimentado una transformación radical con un enfoque claro en reducir peso y aumentar potencia para alcanzar velocidades increíbles, acercándose al límite de los 500 km/h.
El hypercar, que a pesar de su rendimiento extremo sigue siendo fácil de conducir, se destaca por su impresionante relación peso-potencia. Al eliminar casi una tonelada de peso, alcanza los 1.133 kg, y tener 1.600 CV de potencia genera una relación de 1,4 CV por kilogramo. Este logro supera incluso a los monoplazas de Fórmula 1 actuales, estableciendo un nuevo estándar en el mundo del automovilismo.
Al no estar limitado por regulaciones deportivas o de calle, Bugatti ha implementado soluciones extremas en el diseño del Bolide. Cada elemento, desde el aerodinámico splitter hasta el impresionante alerón trasero, está diseñado para generar fuerzas G asombrosas en las curvas, ofreciendo una experiencia de conducción incomparable.
Para Bolide, el único límite es encontrar rectas lo suficientemente largas como para alcanzar los 380 km/h, y las rectas en pistas aprobadas por la FIA no pueden exceder los dos kilómetros de longitud, con sólo un puñado de excepciones en todo el mundo.
Con solo 40 unidades programadas para producción y un precio estimado de cuatro millones de dólares, el Bugatti Bolide promete convertirse en una pieza de colección codiciada por los amantes del automovilismo de alto rendimiento. Además, marca el cierre de una era para el legendario motor W16 de Bugatti, antes de la llegada de nuevas tecnologías híbridas.
Para los amantes de la velocidad y la exclusividad, el Bolide es más que un automóvil: es una obra maestra sobre ruedas que marca el inicio de una nueva era en el rendimiento automotriz.