En agosto del 2020, Chevrolet Argentina comunicó a través de su cuenta en Twitter el regreso de un modelo emblemático. “Vuelve la Silverado”, tuiteó para la alegría de los fanáticos de esta pick-up full-size. Todo indicaba que su lanzamiento sería en el último trimestre del 2021, pero eso no sucederá.
¿El motivo? Las trabas a la importación impuestas por el Gobierno, que han hecho reformular su estrategia y apostar por “el ingreso de vehículos de otros segmentos que están presentando una alta demanda en el mercado argentino”.
Esto significa que en lugar de usar sus dólares para importar la Silverado desde México prefiere utilizarlos para modelos como Joy, Onix, Onix Plus, Tracker, Spin, S10 y Trailblazer, que se producen en Brasil.
Según informó Chevrolet en su momento, la Silverado iba a llegar a esta parte del mundo con motor turbodiésel 3.0 litros de 277 CV y 625 Nm, de torque acoplado únicamente a una caja automática de diez velocidades.
Tan entusiasmados estaban en la filial local de General Motors que tenían planeado el lanzamiento de una segunda opción, pero naftera V8 5.3 litros de 355 caballos.
Además, se prometía un precio “competitivo” para plantarle cara a Ram 1500 y 2500 y Ford F-150.
