El SEMA Show 2021, la exposición de automóviles personalizados y accesorios que se realiza en Estados Unidos, siempre entrega vehículos sorprendentes preparados por las propias marcas para darles una idea a los usuarios de su grado de personalización. General Motors, por ejemplo, lo demostró con una pick-up Chevrolet Silverado customizada de manera extrema y a la que bautizó como Chevrolet Beast.
Esta máquina, que fue preparada para enfrentarse a cualquier tipo de terreno, se destaca por tener una carrocería muy liviana y una caja reducida si se la compara con el modelo que sirve de base.
Para darle una amplia capacidad off-road se le acortó su distancia entre ejes, se ensancharon sus vías hasta unos enormes 2,31 metros y se le equipó con unas suspensiones off road de 30,4 cm de recorrido en el tren delantero y 39,4 en el trasero.
El Chevrolet Beast, que se apoya al suelo sobre unos neumáticos con llantas de 20 pulgadas, cuenta con un motor 6.8 V8 sobrealimentado de 659 CV, que es el mismo que se utiliza en el Corvette C7 Z06.
Toda la potencia de este impulsor se transmite a través de una caja automática de diez velocidades que, por supuesto, cuenta con reductora para afrontar las subidas de mayor dificultad.
Esta pick-up extrema también se destaca por contar con una jaula de seguridad de cromo 4130 y unas puertas reconvertidas en simples barras protectoras. En interior tiene cuatro butacas firmadas por Recaro con cinturones de seguridad de cuatro puntos; mientras que en el tablero se lucen dos pantallas de siete pulgadas cada una.
Según Jim Campbell, vicepresidente de Rendimiento y Deportes de Motor de General Motors en Estados Unidos, el Chevrolet Beast “lleva a los todoterreno de alto rendimiento al siguiente nivel”.