El exclusivo salón Top Marques de Mónaco fue el escenario perfecto para presentar el nuevo proyecto de personalización de la BMW R 18 de Radikal Chopper. Se trata de la R 18 Magnifica, una reinterpretación extrema de la maxi cruiser alemana donde el lujo, la artesanía y la nobleza de los materiales utilizados se dan cita en esta moto única y fascinante.
La idea de construir una moto custom basada en la BMW R 18 se debe a Raffaello Polchi, propietario de Officine Riunite Milanesi y aficionado a las motos de toda la vida, pero el proyecto y la mano son de Andrea Radaelli, de Radikal Chopper, un nombre muy conocido en el sector.
La inspiración para el diseño de la BMW R 18 Magnifica hace un guiño a las motos de época de los años ’20 y, en particular, a la BMW R 37. El uso de un material concreto como la madera recuerda mucho a las motos del pasado, que la utilizaban para ciertos detalles como las empuñaduras.
El uso de este material también responde al deseo de poner algo “vivo” en la moto. Además, la madera encaja de forma coherente con el diseño de la R 18 Magnifica, dando a esta custom un efecto chic, retro y moderno al mismo tiempo.
No hubo CAD ni renderizado como punto de partida, sino como mucho un boceto de la moto: el resto se debe a la imaginación creativa de Radaelli.
La R 18 se planteó inicialmente sin todos los elementos necesarios para la producción en serie y luego se rediseñó respetando las proporciones entre la parte delantera y la trasera para conseguir una lógica visual armoniosa. Nada en la R 18 Magnifica se ha comprado, todo (o casi todo) ha sido diseñado y construido a mano.
La excepción son las llantas, mecanizadas en aluminio con máquinas de control numérico, pero siempre según un diseño de Radikal Chopper. Incluso los innovadores discos y pinzas de freno se han creado especialmente.
El colín y el asiento son de una sola pieza de suspensión y dan la sensación de flotar en el aire. La parte trasera es de caoba con una sección central de acero inoxidable pulido, lo que le da a la moto un aspecto de joya.
Las horquillas tienen la misma inclinación que las originales, pero un aspecto que recuerda a las de las motos de época; sin embargo, el interior es completamente moderno, construido con piezas de aluminio.
El sistema eléctrico no ha sido modificado; todo es completamente funcional. Las dimensiones, las llantas y los neumáticos se han mantenido fieles a la original: la moto es perfectamente utilizable.