Bentley, el emblema de la opulencia automotriz británica, ha dado un gran paso adelante con el lanzamiento oficial de la cuarta generación del Bentley Flying Spur. Este sedán de lujo, que se destaca como el más potente en la línea de la marca, ha sido renovado para ofrecer una experiencia de conducción que combina la eficiencia híbrida con un rendimiento deportivo excepcional.
A primera vista, el nuevo Flying Spur puede parecer familiar, con un diseño exterior que conserva la elegancia clásica del modelo anterior. Sin embargo, los cambios más significativos se encuentran bajo la piel. El sedán presenta una serie de mejoras estilísticas que acentúan su carácter deportivo y lujoso, incluyendo una nueva parrilla, parachoques delantero y difusor trasero.
El acabado Brightware aporta una esencia moderna, mientras que las nuevas luces LED de bienvenida, que proyectan un logotipo animado de Bentley en las puertas, subrayan la exclusividad del vehículo.
Las llantas de 22 pulgadas con diez radios, disponibles en dos acabados, completan el aspecto imponente del Flying Spur. En el interior, los cambios son igual de impresionantes. Los asientos cuentan con un acolchado de diamantes en 3D y un patrón de perforaciones revisado, mientras que la piel de diamante 3D Tactile Precision adorna las puertas y los pilares B.
La tecnología es uno de los pilares de esta nueva generación. El Flying Spur incorpora una pantalla giratoria de alta definición de 12,3 pulgadas, que puede mostrar tres diales analógicos según la preferencia del conductor. La actualización del software My Bentley App Studio ofrece una gama de aplicaciones útiles, poniéndolas al alcance de la mano del conductor para una experiencia más conectada y personalizada.
El verdadero corazón del nuevo Flying Spur radica en su sistema de propulsión híbrido de tracción total Ultra Performance. Combinando un motor V8 biturbo de 4.0 litros con 600 caballos de fuerza y un motor eléctrico de 190 caballos de fuerza, el sedán es capaz de generar hasta 782 CV y 1.000 Nm de torque en modo Sport. Este sistema de propulsión permite al Flying Spur avanzar en modo EV hasta 76 kilómetros de forma silenciosa y serena, mostrando así un equilibrio entre rendimiento y eficiencia.
El chasis activo Bentley Performance, que viene de serie, ha sido optimizado con amortiguadores de doble válvula, mejorando la capacidad de control de la amortiguación de rebote y compresión para una conducción más precisa y cómoda.
Aunque aún no se ha anunciado la fecha exacta de inicio de la producción, se espera que comience a finales de este año. Con su combinación de lujo, tecnología y potencia, el nuevo Flying Spur está destinado a ser una de las opciones más deseadas en el mercado de los sedanes de lujo.