Viajar a mundos virtuales desde el interior de un Audi será pronto una posibilidad. En un futuro próximo los pasajeros de los asientos traseros podrán utilizar unas gafas de realidad virtual (RV) para sumergirse en juegos, películas y presentaciones. La clave: el contenido virtual se adapta a los movimientos del coche en tiempo real.
La firma de Ingolstadt hará esto posible gracias a la start-up Holoride, de la cual tiene un pequeño porcentaje y que quiere convertir los viajes en coche en una experiencia multimodal.
Esto es posible gracias a una nueva tecnología que adapta en tiempo real los contenidos virtuales a los movimientos del vehículo durante la conducción: si el coche toma una curva a la derecha, la nave espacial del mundo virtual también volará hacia la derecha, por ejemplo; si el coche acelera, la nave virtual también lo hace.
Iniciado por Audi, el desarrollo de esta innovadora tecnología de realidad virtual (RV) o realidad extendida (XR) está siendo avanzado y comercializado para diferentes fabricantes por la start-up especializada en sistemas de entretenimiento tecnológico.
El viaje sincronizado con el movimiento a través de mundos virtuales también reduce el fenómeno común de mareo en el coche que suelen experimentar los pasajeros que leen un libro o disfrutan de medios audiovisuales en tabletas electrónicas.
Como parte de este proceso, Holoride publicó el denominado Elastic Software Development (SDK) en su espacio privado de reciente lanzamiento Holoride Creator Space, una plataforma que permite a los desarrolladores de contenidos crear formatos adicionales de realidad extendida.
El SDK Elastic se ha creado para el motor de juegos Unity y permite a los desarrolladores acceder a herramientas para diseñar experiencias de juego inmersivas y formatos de entretenimiento.
El “Contenido elástico” representa una categoría de medios totalmente novedosa desarrollada para los automóviles que permite un nuevo enfoque en la creación de contenidos. Desde aventuras espaciales hasta la transmisión de los últimos éxitos de taquilla y recorridos por ciudades históricas, las posibilidades prácticamente no tienen límites.
