Tony Castro Ulloa, el nieto de Fidel Castro, está en el ojo de la tormenta por el estilo de vida que lleva en Cuba. Vive de lujos y no se priva de nada. A través de lo que muestra en sus redes sociales, de todo lo que presume, deja en claro la diferencia con los ciudadanos comunes.
La isla enfrenta una de las peores crisis económicas de su historia. A esto se le suman las medidas que toman los gobernantes y que están haciendo grandes daños en la población de menos recursos. “La crisis de la pandemia y los cuatro años de sanciones de Donald Trump han llevado a la economía a una situación en la que ya no hay más remedio que poner en marcha el cambio”, comentó Carlos Alzugay en BBC Mundo.
Sin turismo, las largas filas para obtener productos básicos, como harina para hacer pan, se volvieron moneda corriente. El desabastecimiento llegó a una instancia en la que la población tiene que salir a pedir a los gobernantes medidas acordes.
En la otra punta Tony, de 21 años, pasea en sus autos de lujo, sale a navegar en su yate y no escatima en gastos. “Eso no es nuevo (que los descendientes de poderosos muestren su vida de ricos), siempre ha ocurrido. Ahora ya no tienen miedo de mostrar lo que ellos tienen con su poder. El socialismo es la repartición igualitaria de la pobreza. Todos somos pobres, excepto ellos”, comentó el activista José Ramón Polo, de la Mesa de Diálogo de la Juventud Cubana.
El nieto de Fidel e hijo del médico Antonio Castro y Lisette Ulloa compartió, a través de su cuenta de Instagram, diferentes viajes que realizó a destinos como Francia y España. Además, fotos de los distintos destinos turísticos dentro de Cuba. Incluso llama la atención la variedad de autos de alta gama. Suele recorre la isla en un BMW sin ningún miramiento.