Pocos días después de que comenzara el 2022, Ricky Montaner y Stefi Rotiman se casaron y el evento se ubicó entre los más destacados del año. Todo lo que sucedió fue tema de debate en las redes y en los medios de comunicación en la previa, pero principalmente durante el post. De hecho, el día se vio opacado por el in crescendo de rumores de una mala relación entre la influencer argentina y su suegra, Marlene Rodríguez.
El detonante de esta situación habría sido la elección de vestuario de la mamá de Ricky, quien lució una pollera negra junto a una camisa blanca y decoró su peinado con una corona de perlas. Así rompió la tácita regla de oro de no vestir de blanco en una boda para dejarle ese color a la novia. Incluso, se filtró que la joven novia expresó: “Hasta acá me tengo que aguantar estas cosas”.
Después las aguas se calmaron hasta que la blonda arribó sola a la Argentina después de la luna de miel. Eso generó rumores de una posible crisis con su marido y tuiteó: “Las mujeres más fuertes son las que se ayudan entre sí”. Tras el contundente mensaje, todos los dedos apuntaron hacia Marlene.
Cansada de tantas especulaciones, Stefi habló con Perros de la calle, el programa radial multimedia emitido por Urbana Play y dijo: “La gente debe estar harta de leer tanta falacia porque se dicen cosas que no son verdad. No me puedo llevar mejor con la familia de mi marido”.
Además, añadió: “Entonces que digan lo que digan, pero llega un punto que nos llegan cosas de diarios serios. ¿Lo último que no podía creer? Lo que leí hoy sobre un tuit que escribí y que fue dirigido a mi suegra. ¡Siguen con eso!”.
Por último, los conductores consultaron cómo se tomaban puertas adentro todos los rumores y las noticias sobre el vínculo entre ambas. “Nos reíamos de lo que se dice, pero ahora ya no lo hablamos. Yo me contengo, pero me encantaría responder todo. Al principio me afectaba, pero ahora ya no porque entiendo que es mentira”, cerró con claros signos de frustración.
