El 14 de junio de 2014 cambió la vida de María Laura Santillán. Una década después, y en el marco del mes rosa, que busca generar conciencia sobre la lucha contra el cáncer de mama, la legendaria conductora se prestó a una charla a corazón abierto al hablar de cómo pudo superar la enfermedad y cuáles fueron las palabras de su médico que marcaron un antes y un después en su actitud.
“Yo siempre digo que el aro del corpiño me avisó. Parece loco. Me molestaba. Ahí fue que empecé a tocarlo y pronto noté algo durito, pero chico. Me lo miraba, creía que era un granito, alguna cosa interna, hasta que después de unas semanas, llamé a mi médico y le pedí una orden para hacerme una ecografía mamaria”, comienza contando a Revistas GENTE.
“Cuando me hacía el estudio, a la ecógrafa le cambió la cara. Me dijo que quería hablar con mi médico. Ahí nomás lo llamó por teléfono. De ese consultorio me fui shockeada rumbo a una farmacia porque me había indicado que me hiciera una punción. Compré todo, volví y le dije que no quería hacérmela, que no iba a esperar un mes el resultado”, afirma.
En ese momento lo primero que hizo fue llamar a su hija más grande para contarle lo que le estaba pasando, y avisó a su que no iba a ir. “Mi ginecólogo, Rolando Turrado, el obstetra del parto de mis hijas. ‘A la noche voy a tu casa’, me dijo. Estaba por viajar un mes a México, pero no dudó y pidió un quirófano para operarme. Así que la intervención la hicimos a los dos días sin la punción. Confié a ciegas en él con la teoría de que era algo maligno”, agrega.
María Laura Santillán revela cómo fue atravesar la quimioterapia
“La quimio fue fuerte porque, por más que te la hagan espléndidamente bien, es dura. Yo la transité en soledad, por decisión propia. Más allá de que estaba acompañada por amigas y por familia, cada día de quimio y el posterior prefería meterme adentro. Se te vienen pensamientos de adónde va a parar todo, que va a suceder si me ocurre algo, qué pasa con mis hijas, qué necesito prever..., cosas que nunca en la vida se te cruzan. Momentos de terror”, relata la conductora de LN+ e Infobae.
“Una vez que me lo sacaron se hizo el estudio del tumor. El rango estaba en el medio entre hacer rayos o rayos y quimioterapia. Se podía elegir. ‘Démosle con todo’, fue la frase de mi oncólogo. El momento en el que te dicen que debés hacer quimioterapia es tremendo, como cuando te informan que tenés la enfermedad. Claro, la quimioterapia se asocia a la muerte, a un camino de ida y no de sanación. Fue el segundo shock. Pasa que después de que la atravesás no le tenés miedo a nada”, confía.
En su caso, la elección se inclinó por el tratamiento más largo para cumplir con eso de "darle con todo" que le había propuesto su médico. Incluso hizo más quimioterapias de las aconsejadas en Argentina, en base a lo que le recomendaron en Estados Unidos. “Cuando me recuperé de la quimio en 2015 volví al ruedo, más allá de que nunca dejé de trabajar del todo porque me hacía bien. Todo terminó en 2020. Menos la vida: la vida sigue”, insiste.
“Uno nunca imagina que puede tener una enfermedad como el cáncer. No está en tu cabeza, así como tampoco lo está el hecho de que te podés morir. El momento en el que te lo dicen es fuerte. Se trata de una enfermedad mortal. Las cosas, sin dudarlo, te cambian”, confiesa.
“Por eso, si tengo que pensar en qué me dejó esto, es que en primer lugar sabés que tenés el tiempo presente. Una cosa es que te lo digan, pero otra es sentir el famoso ‘esto se puede terminar’ o que el cáncer puede volver. De esto aprendí a no perder el tiempo en cosas o personas que no van. Siempre fui de decir que no a muchas cosas, y ahora mucho más. Elijo qué hacer, qué vale la pena y qué no. Las cosas ocupan otro lugar”, explica.
Qué le dice María Laura Santillán a las mujeres que hoy pasan por la situación que le tocó atravesar
La conductora eligió cerrar su reportaje con GENTE mediante un mensaje para quienes hoy deben enfrentar la situación de un diagnóstico como éste: “Hay que tener respeto por la enfermedad. El desafío es que te pase y la cures. ¡Manos a la obra! El otro camino no tiene que existir. Sigue siendo una enfermedad, no hay que olvidarlo. Pero hay herramientas para atravesarlo y salir”.
“Cuando uno encuentra algo que no es habitual en el cuerpo debe consultar inmediatamente. Yo estoy dando esta nota diez años después gracias a la detección temprana. No tenía antecedentes familiares y simplemente me había hecho el estudio genético porque temía por mis hijas”, manifiesta.
Fotos: Alejandro Carra
Retoque digital y tapa: Darío Alvarellos y Gustavo Ramírez
Video: Martina Cretella y Miranda Lucena
Makeup: Daniel Britzzi (@daniel_maquillador
Look de Ginebra (@ginegrabsas), joyas Pandora (@theofficialpandora) y zapatos Ricky Sarkany (@rickysarkany). Maquilló Belén Cambaceres (@belencambaceres), peinó Marco Zarate (@marcozarate80) y se encargó del estilismo Manuela Meroni (@manuelameroni)
