Paulo Londra y Rocío Moreno, su expareja y madre de sus hijas Isabella y Francisca, se encuentran batallando en la justicia desde hace algún tiempo. A pesar de que en el principio de la contienda se mostraron públicamente como una "familia feliz", duró poco y en lo últimos meses la situación cambió debido a que ella lo denunció por haber desaparecido cuando estaba embarazada.
Según Moreno, el cantante de Trap hizo su último viaje a los Estados Unidos sin avisarle y se enteró gracias a las redes sociales. Desde allí, ella decidió buscar una compensación económica como agregado a la cuota alimentaria que corresponde por ley.
Hace una semana hubo una audiencia en la que los abogados de ambas partes no se pusieron de acuerdo, mas se filtró la información que él habría ofrecido 200 mil pesos mensuales, una suma que no fue aceptada.
La escritora de un marcado estilo feminista, Florencia Freijo, remarcó esta situación y explicó: “Recordemos que debería estar fijado entre un 20 y 30 por ciento de sus ingresos. Ojalá el fallo judicial sea ejemplar”.
El 10 de mayo va a ser la próxima audiencia y se espera que Londra mejore el ofrecimiento. Una de las opciones que se baraja es que ofrecería comprar una casa y un auto a su ex esposa, además de pagar la cuota mensual por sus dos hijas que dispone la ley en todos los casos de separación.
La defensa de Rocío indica que ella dejó sus estudios y su trabajo. Además, con dos nenas de casi dos años y una bebé no se puede mover de su casa sin ayuda de un tercero. En este aspecto, los abogados de Moreno también estarían buscando que Londra contrate una niñera para que ella pueda salir y rehacer su vida laboral.