Santiago Caputo cumplió la promesa: se tatuó una imagen gigante en la espalda luego de que su candidato, Javier Milei, ganara las elecciones. Fue así cómo el mundo se enteró de que era simpatizante de Benjamín Solari Parravicini, el "Nostradamus argentino", que inmortalizó en más de 1.000 dibujos, a los que llamaba psciografías, sus profecías.
Parravicini dibujó entre otros íconos al hombre gris. “El hombre humilde en la Argentina se allega para gobernar. Él será de casta joven y desconocida en el ambiente, más será santo de maneras, creencia y sabiduría. ¡Él llegará luego de la tercera jornada!”, escribió el Nostradamus argentino al explicar su visión. Algo que el asesor presidencial relaciona con el primer mandatario.
Nacido en 1898, el clarividente y "telépata" hizo 1.000 psicografías con mensajes. Quién fue, quiénes eran sus amigos, cuáles fueron sus profecías.
Quién fue Solari Parravicini: de su infancia en zona norte a su encuentro con extraterrestres
Parravicini nació en una familia aristocrática que vivía en la casona de Vicente López. Hijo de Dolores Parravicini y Noriega, prima de Florencio Parravicini, un famoso actor de la época y se Benjamín Solari y Romero un psiquiatra reconocido, que llegó a ser diputado nacional, era el mayor de ocho hermanos.
En casa lo llamaban Pelón. Ya de niño su costado esotérico estaba activado: decía que hablaba con ángeles, duendes y hadas. Hijo de un psiquiatra, no faltaron estudios para descartar enfermedades mentales. Pero no hubo evidencia de que las padeciera.
Cuentan que en sus primeros años hizo una predicción: “una guerra estallaría en 1914″.
En paralelo a sus visiones, Parravicini desarrollaba una carrera artística prometedora. Expuso en la calle Florida y en la Asociación Amigos del Arte, y fue premiado en exposiciones internacionales. También trabajó como maestro en el Liceo de España. Hizo grandes amistades y fue uno de los inspiradores de Fabio Zerpa.
Cuentan que durante una fría noche bañada de neblina, Parravicini y un amigo se cruzaron con un individuo de apariencia inusual, alto, muy rubio, con ojos grandes, redondos y sin párpados. y que les hizo señas para que se fueran hacia la Diagonal, en dirección a la Casa de Gobierno. Ellos no le hicieron caso y su amigo le lanzó la pregunta: “Che... ¿no te parece que este hombre no es de este mundo?". Ese fue su primer encuentro con la gente de otros mundos.
Pocos días después, cuando salía del teatro, de ver "My fail lady" en el Teatro Nacional y de comer un puchero de gallina pasó otra vez. “Serían como las tres o cuatro de la madrugada. En esa época había mucho asaltos por acá y tuve miedo, de manera que decidí tomar por la Diagonal, rumbo a Belgrano. Cuando iba cruzando la calle, se me apareció el ‘hombre’ otra vez", contó a una revista internacional el artista.
Y sumó: “Me encontré como en un borde un barco con una baranda que parecía de metal. Era como una explanada negra. Como de caucho. Entonces, aparezco yo allí, no sé cómo y me encuentro con dos seres iguales. Muy sonrientes, me saludaron poniéndome las manos en el hombro". Según reveló hablaban todos los idiomas y venían de Venus, y con ellos dio una vuelta en un plato volador.
Las profecías de Solari Parravicini
Hasta los 76 años, cuando murió, Parravicini hizo 1000 dibujos proféticos sobre acontecimientos que sucederían tanto en la Argentina como en el mundo. Algunos interpretan estos mensajes en redes sociales ya que muchas de sus predicciones, para muchos, se habrían cumplido (el atentado de las Torres Gemelas y la asunción del Papa Francisco, entre ellas).
Víctor Manuel Jara, uno de los estudiosos de la vida de Parravicini, hizo una monografía donde mencionó los siguientes aciertos en las profecías del artista: el lanzamiento del primer satélite artificial y del primer ser vivo al espacio, los peligros de la cibernética y la robotización, la revolución cubana, la crisis de los misiles en Cuba, la Segunda Guerra Mundial, las explosiones atómicas de Hiroshima y Nagasaki, el fenómeno hippie de los años 60, los experimentos genéticos, la fecundación in vitro, la aparición de pestes y enfermedades desconocidas, la aparición del tercer sexo, la caída de los valores morales, religiosos y espirituales en el año 2000, y el incremento de los delitos urbanos.
Lista de profecías, según fechas:
1936: Cuba, ideal de turistas, será alcanzada en descalabros, será del oso y el oso sobre su cabeza permanecerá por cinco tiempos. Luego, un cúmulo de sorpresas le sorprenderá. Habrá sangre, sangre y fuego, fuego y muerte, y luego nada.
1938: Caerá el corazón del mundo, año 1940. Caerá y será alemán hasta 1944.
1938: La Argentina debe ya prepararse a sufrir. Tendrán unos mandones que le reducirán a un comunismo de corte fascista. La muerte correrá por sus calles y caminos.
1939. La Argentina despedazada, partida en dos ideas levantará un fantoche de nueva doctrina. La iglesia hará silencio. La oración vencerá.
1939: Llegarán a la Tierra nuevamente seres extraterrestres. Llegarán en naves espaciales diferentes, de diferentes planetas… y habitarán los cráteres montañosos de los Andes y del sur patagónico. Ellos convivirán la vida humana, se les verá y se les hablará.
1941: Duelo de poderes entre yanquis y rusos. Duelo de conquista espacial y trueno. Aunque no parezca, América llevará el cetro.
1971: La Argentina tendrá su “revolución francesa”, puede ver sangre en las calles, si no ve el instante del “hombre gris”.
1972: “Nueva era llega! Mundo en disfraz. Mascarada perenne. La iglesia entregará su otorgamiento a la renunciación del Papado y el nuevo será joven de ideas.
Sin fecha: Cerebros pensantes astrales llegarán a la Tierra y le ayudarán.
Sin fecha: La Teoría de Darwin dejará de ser porque se sabrá que el hombre bajó de los planetas”
El legado de Parravicini
El artista plástico no tuvo hijos por lo que todo se legado fue para sus amigos, entre ellos: el Sigurd Von Wurm, Pedro Romaniuk, el astrólogo Norbert Pakula y el ufólogo Fabio Zerpa, quien lo bautizó en su título como el Nostradamus argentino.
Las psicografías originales las conserva en su mayoría el hijo de Sigurd Von Wurm, Eduardo. "Tales mensajes fueron recibidos durante un largo lapso, entre 1938 y 1969 y gozan de justificada fama, porque algunos ya se cumplieron y otros muchos corresponden a este inquietante y anhelado siglo XXI”, se leía en el blog de Von Wurm.
"Tuve el privilegio enorme de estar al lado de un profeta - Benjamín Solari Parravicini (1898-1974)-, de verlo trabajar con su mediumnidad; le tengo que estar profundamente agradecido a la vida por esos seis años increíbles junto a un hombre que se conectaba con el futuro", escribió Zerpa en el prólogo de su libro.
Además, hizo un documental, a fines de la década del 70, con el que paseó por dieciocho países de América y Europa, sobre las profecías de Solari Parravicini, en las cuales encontró setenta y cinco aciertos.
