Esta semana apareció en la Selección de Francia una extraña enfermedad que preocupó a muchos futbolistas en Qatar. Los expertos en salud pública alertaron estos posibles casos del virus denominado “gripe de camello”.
El virus preocupa a quienes viajaron en este último mes a Doha para ver el Mundial y los más afectados están siendo justamente uno de los finalistas, la Selección de Francia. El último y tercer contagio sería el delantero Kingsley Coman, quien se contagió en las últimas horas y peligra su participación frente a la Argentina.
Esta misma semana, Dayot Upamecano y Adrien Rabiot no pudieron estar presentes en la semifinal de frente Marruecos. Incluso el mediocampista de la Juventus tuvo que permanecer aislado en el hotel.
La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido precisó que los médicos monitoreen a las personas que hayan viajado al Mundial y que tengan precaución con quienes presenten cuadros de fiebre, dificultades respiratorias, vómitos, tos y diarrea, síntomas asociados a la zoonosis respiratoria que lleva el nombre de “gripe de camello”.
El contagio se puede dar por contacto directo o indirecto con dromedarios infectados y también un nuevo estudio enseñó que tiene capacidad de transmisión entre humanos, aunque estos casos se dieron principalmente en entornos sanitarios.
Este virus se considera un síndrome respiratorio de Oriente Medio o MERS-CoV, causado por un tipo de coronavirus, la cual se propaga “a través del contacto cercano con camellos que portan el virus o una persona infectada, o al consumir carne de camello sin cocinar o leche de camello sin pasteurizar”, indica el ministerio de Salud de Australia.
El virus MERS apareció por primera vez en Arabia Saudita en 2012 y los efecto pueden ser graves con una elevada mortalidad, ya que aproximadamente el 35% de los pacientes diagnosticados con la enfermedad falleció, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).