El 2020 fue un año difícil para todos, y las heladerías artesanales porteñas siguen luchando por sobrevivir. En enero de este año el precio del kilo de helado en la Ciudad de Buenos Aires superó en algunas cadenas los $1.000.
Así el precio de los helados se vio incrementado en un 30% en comparación con el mismo mes del 2020. De esta manera se ubicó tan sólo un poco por debajo de la inflación general del año pasado, que fue de un 36.1% .
“Hoy las heladerías artesanales están con muy baja rentabilidad por el aumento de los precios de la materia prima. Los lácteos tienen los precios más o menos controlados, pero se usan muchos insumos importados que tuvieron fuertes aumentos en 2020, como el chocolate", explicó Gabriel Famá, presidente de la Asociación Fabricantes Artesanales de Helados y Afines (Afadhya).
Según detalló Famá entre los aumentos más significativos están las frutas secas. “El costo del kilo de helado puede ser alto, pero hay que considerar la calidad del producto y de la materia prima que se usa. El precio condice con eso”, aclaró Gabriel.
“Comenzamos a sufrir el impacto de la pandemia ya desde los primeros días de marzo del año pasado. Fue ahí cuando comenzamos a notar menos gente en la calle, incluso antes de la cuarentena", detalló Famá.
Gabriel agregó que "gran parte de las ventas de las heladerías son impulsivas y dependen de la circulación de gente que haya en la vía pública. El punto de inflexión fue el 10 de marzo cuando sólo se permitió vender por delivery y no todas las heladerías lo tenían. Muchas se tuvieron que adherir a plataformas que cobraban hasta 35% de comisión”.