La Señora Televisión –que este 2019 vuelve a la pantalla– y su ex marido –el multipremiado artista– se reencontraron a ocho meses de perder a Leo, su hijo mayor. "¡Bravo, Negro!", le dedicó ella desde la platea. "Vivimos un momento único e irrepetible", confió él y agregó: "A mí me hizo muy bien verla renacer".
A la función número 161 de La jaula de las locas asistieron seiscientos cuarenta espectadores. Entre los aplausos y los vítores se escuchó más de una vez un cálido y sentido “¡bravo, Negro!” proveniente de una de las mesas del centro. Quien así aclamaba la interpretación del protagonista, Raúl Lavié (82), no era otra que Lidia Satragno (83), la mítica conductora televisiva que fue su pareja entre 1964 y 1976.
Dos hijos, tres nietos y más de cuatro décadas después, la buena onda sigue intacta. Es por eso que él, en medio del saludo final, bajó del escenario para agasajarla con un ramo de flores. Al verse, ambos se fundieron en un abrazo mientras el público, con su ferviente ovación, convertía en susurros las palabras de afecto que se dedicaban al oído.
Él, horas más tarde, le confiaría a GENTE: “Para mí, reencontrarme con Lidia después de haber vivido la tremenda experiencia de perder a Leo (N. de la R: Su último encuentro había sido en el último día con vida de Leo Satragno, su amado hijo mayor, 14/12/1963–10/1/2019) fue un momento único e irrepetible. Además, me hizo muy bien verla renacer y recuperar las ganas, algo fundamental. Sin dudas, fue una noche maravillosa para mí y también para mi familia, porque todos en casa saben lo que Lidia siempre ha significado en mi vida”.
Fotos: Fabián Uset y Archivo Atlántida.
