Con la abrupta caída del turismo en 2020, que sufrió un derrumbe de un 70 % de los viajes hacia Europa, por fin estaría llegando la primavera para el viejo continente. La Comisión Europea anunció un plan para suavizar las restricciones a los viajes recreativos de cara al verano tanto hacia la Unión Europea como dentro de ella.
Según esta nueva propuesta, los extranjeros que procedan de un país con buena situación epidemiológica o que se hayan vacunado contra el coronavirus podrán entrar en la Unión Europea.
"Es crucial para salvar la temporada de verano y para ayudar a los empresarios turísticos no sólo a sobrevivir, sino a volver a vivir de sus negocios. Vamos a ver más gente viajando de forma distinta. Definitivamente, este verano habrá mucha gente al aire libre todavía, mucha gente tratando de evitar las grandes multitudes", explicó Eduardo Santander, director ejecutivo de la Comisión Europea de Viajes a Euronews.
Hasta el momento, se implementó una restricción temporal a los viajes no esenciales a la UE desde muchos países no pertenecientes a la UE. En tanto, los Estados miembros podrán seguir restringiendo los viajes desde los países en los que surjan nuevas variantes, mediante el llamado freno de emergencia. Esto permitirá a los Estados miembros actuar rápidamente y limitar temporalmente, a un mínimo estricto, todos los viajes desde los países afectados, durante el tiempo necesario para poner en marcha las medidas sanitarias adecuadas.
Respecto a las vacunas, la propuesta de la Comisión incluye a todas las personas que recibieron la dosis recomendada de una vacuna autorizada por la UE. Las vacunas que por el momento han recibido la autorización de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) son las de Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Johnson & Johnson (aunque con límites de edad para las dos últimas). Pero hay varias en distintas fases de evaluación, incluida la rusa Sputnik V.
La Comisión también propone elevar el umbral relacionado con los casos de COVID-19 que se utiliza para determinar la lista de países desde los que se deben permitir los viajes. Para limitar el riesgo de que entren nuevas variantes de COVID-19 en la UE, se coordinará un nuevo mecanismo de “freno de emergencia” a nivel de la UE. Actualmente, el Consejo está considerando esta propuesta.
Según trascendió, la propuesta será examinada para poder aplicarla “a primeros de junio”. Sin embargo, el hecho de que los viajeros vacunados puedan viajar a destinos europeos no significa que puedan hacerlo “sin condiciones”.
En este sentido, los países de la UE deberían exigir a las personas que viajen por cualquier motivo esencial o no esencial, con la excepción de los trabajadores del transporte y las fronteras, que se les realice una prueba de PCR negativa como mínimo 72 horas antes de la salida.
Además, pueden requerir autoaislamiento, cuarentena y rastreo de contactos por un período de hasta 14 días, así como pruebas adicionales de COVID-19 según sea necesario durante el mismo período.
Requisitos para viajar a Europa desde la Argentina
Continúan suspendidos los vuelos desde y hacia el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del norte, a raíz del surgimiento de la nueva cepa de Covid-19.
Quienes salgan del país deberán completar la Declaración Jurada Electrónica, disponible en la página de Migraciones, dentro de las 48 horas previas a abordar y cumplir con los requerimientos del lugar de destino.
Para el regreso al país, deberán completar DDJJ electrónica y un total de tres pruebas para SARS-CoV-2. La primera es previa al ingreso al país, luego del ingreso se realizarán un nuevo testeo, y otro con posterioridad de 7 días al ingreso.
Quienes obtengan resultados negativos de los dos primeros testeos, al ingresar tendrán un aislamiento domiciliario, el cual será controlado. En caso de verificarse el incumplimiento del aislamiento, las autoridades deberán radicar una denuncia penal. Para finalizar su aislamiento domiciliario, deberán tener un resultado negativo en su última prueba de SARS-CoV-2.
Quienes resulten positivo en el testeo al ingreso al país anteriormente mencionado deberán realizar a continuación el test de PCR para determinar el tipo de cepa que poseen. Los costos de cada uno de los testeos serán a cargo del pasajero.
Tanto la persona infectada como sus contactos estrechos deberán cumplir el aislamiento en los lugares dispuestos por las autoridades nacionales correspondientes y destinados a tal fin, hasta tanto se efectúe el traslado seguro hasta su localidad de residencia, si correspondiera.
La estadía en los citados lugares de aislamiento será a cargo de la persona que ingresa al país, y deberá efectivizarse en la forma que establezcan las autoridades competentes.