Desde horas de la tarde las cámaras de televisión acompañadas por fanáticos y amigos de Silvina Luna comenzaron a congregarse cerca de la propiedad de Aníbal Lotocki, ubicada en el barrio de Olivos. El motivo, reclamar justicia por la muerte de la ex Gran Hermano, quien se encontraba en juicio con el cirujano de las estrellas por mala práxis.
Pamela Sosa irrumpió furiosa en el lugar por la muerte de su amiga y frente a las cámaras contó a los gritos: "Silvina era una persona que quería perdonar siempre. Ella me acompañaba a mí en el enojo, en esta bronca y me decía: 'Pame vamos a salir adelante. Tranquila que ya vamos a recibir justicia".
Y continuó muy afligida: "No lo puedo creer, no me puedo imaginar el dolor de su hermano. No sé, yo tengo hermano, digo. Se me muere un hermano de esta manera me quiero matar. Me quiero morir".
Además remarcó que a su parecer la Justicia argentina falló desde el primer momento a favor del médico y no de sus pacientes, quienes sufrieron las consecuencias de sus intervenciones. "Tengo mucho enojo porque no puedo creer que la Justicia no haga nada. Necesitamos que haya una sentencia firme, por favor. No puede ser que este asesino siga suelto. Ya mató a un montón de personas. Por favor, necesitamos que alguien lo pare", afirmó Pamela Sosa.
"¿Para que esta los jueces? ¿Para que están? Para cuidarnos. Y acá nadie nos cuida. ¿Entendés? Venimos peleando. Venimos peleando con Silvina hace cinco o seis años, sometiéndonos a un montón de estudios, un montón de cosas que son horribles. Chicos, ustedes no sabe el dolor del pinchazo que me dan por acá. Por esto yo tengo una diabetes que gracias a Dios la llevo bien. Pero no tendría que ni tener una diabetes por un metacril, una mierda de veneno que nos puso este hijo de puta. ¡Quiero que salga! ¡Que me de la cara! Que me diga por qué mierda tenemos esto adentro", gritó con dolor por ella y todos aquellos que murieron como consecuencia de las intervenciones del médico.
"Dejemos de escuchar tonterías. Los jueces dictaminaron sentencia. Tiene cuatro años de prisión. Nosotros ganamos. ¿Qué estamos esperando para que le den la sentencia firme? Que se vaya preso. Se murieron dos persona en un mes. Dos personas. Jóvenes. Silvina Luna tenía toda una vida por delante", concluyó con lágrimas en los ojos, al recordar a su amiga y a Mariano Caprarola.