La nueva variante Ómicron fue detectada por primera vez a mediados de noviembre en Sudáfrica, y provocó un incremento de casos positivos de coronavirus en Europa que pronto se reflejó en distintas partes del mundo.
Sin embargo, ahora, según declaraciones recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Europa puede haber ingresado en una nueva fase que podría llevar al fin de la pandemia en la región.
En ese marco, el pasado domingo Hans Kluge, director regional de la OMS para Europa, aseguró: "Es posible que la región se esté acercando al fin de la pandemia".
Sobre esa línea, especificó que el cambio ocurrirá una vez que pase la ola de contagios causada por la variante sudafricana que, según el organismo, hará que más de la mitad de la población del continente europeo contraiga la enfermedad en las próximas semanas.
"En cuanto la ola de ómicron disminuya, habrá una inmunidad general durante algunas semanas y algunos meses, ya sea por la vacuna o porque las personas serán inmunes debido a la infección, y también una disminución debido a la estacionalidad", dijo.
Asimismo, la OMS espera que así se produzca un período de tranquilidad hasta que probablemente regrese "el COVID-19 hacia fines de año, pero no necesariamente el regreso de la pandemia".
Sin embargo, pese al anuncio esperanzador de Kluge, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió este lunes en una conferencia de prensa que las condiciones siguen siendo ideales para que surjan más variantes de coronavirus.
Dijo, además, que era "peligroso" asumir que ómicron seria la última, pero agregó que la fase aguda de la pandemia podría quedar atrás este año si se cumplen algunos objetivos clave.
En tanto, respecto a la famosa transición de la pandemia a endemia el titular europeo mencionó: "Se habla mucho de endémico, pero endémico significa que es posible predecir lo que va a pasar. Este virus (nos) ha sorprendido más de una vez, así que tenemos que tener mucho cuidado", recalcó Kluge.