La revelación de Pequeña victoria (Telefe) y El marginal (TV Pública) cuenta su modo de vivir el matrimonio: “Nos casamos casi como un trámite. Y su ansiada maternidad, aunque asegura: “No soportaría compartir a mi hombre con un hijo. Preferiría tenerlo con un/a amigo/a”.
Su relación con Nicolás Giacobone (guionista y ganador del Oscara Mejor Guion por Birdman) nació una noche de sábado en La Giralda, en 2009. “Estaba tomando un café y leyendo un libro de Agatha Christie, hecha un loco y sin maquillaje”, rememora Mariana Genesio.
Giacobone entró para preguntar una calle. Salió y volvió a encararla. “A los pocos días yo ya no tenía más plata para alquilar y me tenía que volver a Córdoba. Entonces me respondió: ‘Venite a casa unos días y vemos qué pasa’. Ese mismo día agarré todas las cosas, me instalé en su departamento y desde esemomento nunca más nos separamos”.
“El amor de mi marido me salvó de caer en la prostitución. Lo que me pasó, sin dudas, pasa una sola vez en la vida. Que una chica como yo, que no trabajó en ninguna película, termine en la fiesta de la cuna del cine, superó todos mis sueños. Y ahora directamente estoy como Vivian Ward, viviendo cada línea del cuento de hadas”. Asegura Mariana.
Dieron el "sí" en 2014: “Surgió como un trámite para poder radicarnos en Estados Unidos por el trabajo de Nico”, explica.
Fue en el Registro Civil de la avenida Cabildo, con su suegra y cuñada como testigos, y ante la presencia de toda su familia, que viajó especialmente desde Córdoba. A pesar de la emoción, para Mariana “fue más importante haber conseguido el DNI con mi nombre que haberme casado”.
–¿Qué te enamora de las personas?
–El sentido del humor. Nico es muy inteligente y no hace chistes convencionales, pero tiene salidas muy ácidas: en eso nos parecemos bastante. También me enamora la originalidad: soy de las que me caen bien esos que por lo general caen mal. Pueden decirme “ay, es infumable”, pero a mí me encantan, porque son únicos y me resultan muy atractivos.
–¿Te gustaría ser madre?
–Quiero ser madre pero no con mi marido. Lo tendría con un/a amigo/a porque siento que no podría compartir a mi hombre con un hijo. La pasión se destruye y en definitiva sé que la familia es una trampa social.
Fotos: Chris Beliera.