La actriz junto a su marido, el galerista Cooke Maroney, disfrutaron de unos días de relax en un exclusivo resort.
Jennifer Lawrence y su marido, el galerista Cooke Maroney, quienes dieron el sí durante el pasado mes de octubre, están disfrutando una lujosa y paradisíaca luna de miel en Indonesia.
Después de la mágica boda, que se celebró la Mansión Belcourt en Newport, Rhode Island, y donde asistieron numerosas estrellas de Hollywood, el impactante complejo Nihi Sumba ha sido un hermoso escenario para que los recién casados pongan el broche de oro a unos días mágicos.
A pesar la gran variedad de alojamientos que el complejo ofrece, la pareja optó, tal y como señala People, por la casa privada del propietario del resort, de nombre Mandaka, está formada por cinco villas, piscina privada, un espectacular salón al aire libre y vistas panorámicas al océano, entre otros muchos lujos. El precio de esta romántica casita del amor es de 11.500 euros por noche, un precio que no todas las billeteras pueden costear.
Durante su estadía, la pareja practicó gran cantidad de actividades, aprovechando el tiempo en un resort que poco después de su apertura en 2015 fue nombrado como el mejor del mundo. Entre estas actividades podemos mencionar paseos a caballo, excursiones a las aldeas cercanas, yoga, surf, buceo, vela y snorkel son solo algunas de ellas. Además, también han podido disfrutar de productos de primera calidad, ya que el complejo cuenta con su propio huerto y con pescado fresco a diario.
Fueron pocos los detalles que nos llegaron acerca de la boda de ensueño de Laurence y Maroney. Sabemos que fue celebrada, como no podía ser de otra forma, en una isla privada y contó con la presencia de 150 invitados entre los que se encuentran Nicole Richie, Kris Jenner o Adele, entre otros.
El weding planner de las estrellas Mark Seed fue el encargado, junto a la empresa Heirloom Fire, de diseñar el exquisito menú del que disfrutaron los asistentes, que tuvo un precio de 210 dólares por persona.
