SIn dudas, el mundo Gran Hermano es un especial aparte y las secuelas que deja marcan a los participantes para toda la vida, tal como le sucedió a Mauricio Córdoba, el ex participante de Gran Hermano 3 que se realizó en el 2002 y que quedo sub campeón por detrás de Viviana Colmenero. Su vida dio un giro 360° grados y el hoy tatuador se dio cuenta que supo tomar bien las decisiones en su vida.
El ex participante estuvo en el piso de LAM y fue entrevistado por Ángel de Brito que quiso indagar acerca de su vida: "Sufrí mucho ahí porque entre con una historia de vida muy díficil, había perdido a mi mamá recientemente, tenía solamente a una hermana, 22 años recién cumplidos, recién llegado de Estados Unidos, no tenía casa, ni plata y mi papá me abandonó a los 4 años, por eso me llamaron", explicó Mauricio.
"Lo más loco es que después de Gran Hermano, la caída fue muy fuerte, tuve muchas oportunidades pero no sentí que fuera lo mio. De hecho, no me arrepiento, porque sin eso hoy no sería tatuador, que eso es lo que me hace ser feliz", expresó el sub campeón del reality acerca de la experiencia que le dejó la casa.
"Viví 4 años sin trabajar y de hecho llevé una vida holgada, recorrí la Argentina, pueblito, provincias, ahorré mucho, pero igual no me pude comprar ninguna casa, solamente auto, pero con los ahorros decidí comprarme varias maquinas industriales para poder trabajar y antes de entrar a la casa de Gran Hermano, vendía lencería y estuve por un tiempo con eso", aseguró el ex participante sobre lo que tuvo que hacer para llegar al día de hoy bien parado.