El cierre de las escuelas en la provincia de Buenos Aires, que anunciaron a mediados de abril por dos semanas y ya lleva casi dos meses, tiene en vilo a la sociedad. Los padres y docentes esperan que no se repita el escenario de 2020, cuando los colegios se mantuvieron cerrados el año entero.
Tras mostrarse inflexibles durante varias semanas, hoy el ministro de Salud dio una señal de esperanza para todos los que anhelan que los chicos vuelvan al lugar al que pertencen: las escuelas.
“Si los números nos dan, pasaremos a una fase más distendida: si logramos estar debajo de los 500 casos cada 100 mil habitantes, podemos volver a tener presencialidad escolar, por supuesto con cuidados...”, adelantó Daniel Gollan en diálogo con Ernesto Tenembaum por Radio Con vos.
El ministro de Salud bonaerense indicó que eso se va a saber antes de que finalice el fin de semana, pero admitió: “Si seguimos con este nivel de caída de casos nos estaría dando la posibilidad” de tener clases y de relajar algunas restricciones a partir de la semana que viene.
“Según los indicadores del semáforo y la ocupación de UTI, venimos bien. Si seguimos así y los números nos dan, pasaremos a fases más distendidas”, adelantó Gollan, lo que podría traducirse también en más apertura comercial, sobre todo en el sector gastronómico y los shoppings.
Al ser consultado específicamente sobre la vuelta de los chicos al colegio, Gollan dijo: “Podríamos volver a tener presencialidad escolar. Lo vamos a saber el domingo”.
Estas declaraciones se produjeron apenas un día después de que el Ministro de Educación, Nicolás Trotta, cuestionara la iniciativa del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, de incrementar las clases presenciales en el nivel secundario en un contexto de alarma epidemiológica, al considerar que “el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires camina por el sendero de la irresponsabilidad y la especulación”.
Pero hoy, en Radio 10 el Ministro Trotta se mostró más moderado y ante la baja de casos en el AMBA sostuvo que “tienen que cambiar los números para que volvamos a la escuela”. Y agregó: “La presencialidad la queremos todos, pero no es una cuestión de deseo, sino que la realidad no nos permite”.