La liga de básquet es la única de las grandes ligas profesionales de los Estados Unidos que todavía castiga el consumo recreativo de cannabis.
La NBA ya dio el primer paso: la marihuana no se encuentra entre las sustancias que se controlan en los análisis antidopaje que lleva a cabo en la "burbuja" de Orlando –donde los jugadores se encuentran recluidos para evitar los contagios de coronavirus–, en la antesala de la temporada que comenzará en diciembre. En el predio de Disney en el que se alojan los jugadores, la Liga dispuso que los análisis médicos obligatorios no incluyan drogas recreativas, que no afectan el rendimiento deportivo.
De acuerdo con el sitio especializado RealGM, esta medida podría extenderse y la Liga eliminaría a la marihuana de la lista de drogas prohibidas. En la actualidad, la NBA es la única de las grandes ligas del país que todavía castiga el consumo de cannabis.
"Creo que va a ser legal después del próximo convenio. No hacer test de marihuana fue una concesión que se hizo a los jugadores por tenerlos encerrados en la 'burbuja'", explicó Bill Simmons, periodista de The Ringer, en un podcast con Zach Lowe, su colega de ESPN.
A medida que muchos estados norteamericanos han relajado la prohibición sobre el cannabis –cuando no lo han despenalizado o directamente legalizado–, varias ligas deportivas han adecuado sus reglamentos a la nueva situación, teniendo en cuenta que el uso recreativo del cannabis no genera ventajas deportivas. Es lo que hicieron este año las Ligas Mayores de Béisbol y la NFL de fútbol americano, que eliminaron la marihuana de la lista de sustancias prohibidas y ahora tratan cualquier problema relacionado al consumo de cannabis del mismo modo que se tratan los desórdenes con el alcohol.
La NBA castigaba el doping por marihuana con multas económicas que, a partir del tercer control positivo, se convertía en una suspensión por cinco partidos. Esta medida fue suspendida en la burbuja por un acuerdo entre la propia NBA y la Asociación de Jugadores, ante la posibilidad de que algunos deportistas se hubiesen relajado en el consumo de marihuana durante el periodo sin competición (más de 40 se mostraron preocupados por ello), cuando aún no se sabía si se reanudaría la Liga.
"Si vas a hacer que los jugadores vivan en la burbuja de Disneyworld durante tres meses y por la mitad de dinero, tienes que hacer algunas concesiones", dijo Lowe.
A fines de febrero Kevin Durant, dos veces campeón y una vez MVP (jugador más valioso de la liga) de las finales, se pronunció en favor de la aceptación del cannabis. "Todos en mi equipo toman café regularmente, o salen a tomar un vino después de los partidos. Para mí, la marihuana debería estar a ese nivel", dijo el alero de los Brooklyn Nets en el podcast de los ex jugadores Matt Barnes y Stephen Jackson, quienes tuvieron inconvenientes durante su carrera precisamente por el consumo de marihuana.
En 2018, el ex jugador Kenyon Martin, elegido en la primera posición del draft de 2000, aseguró que estaba convencido de que al menos "un 85% de los jugadores" fumaba marihuana en el tiempo que él jugó en la NBA.
Aún se desconoce si durante la próxima temporada, que en principio comenzará en diciembre, habrá que volver a encerrar a los equipos o no como en Disneyworld, en Orlando.
A muchos les llamó la atención el nivel de los equipos durante la burbuja. Teniendo en cuenta que venían de un largo parate y que sus integrantes tuvieron que cambiar sus costumbres (y distracciones), algunos opinaron que fumar marihuana fue beneficioso para mejorar su recuperación y bienestar mental.
Varios estudios apuntan que el consumo de marihuana entre los jugadores de la NBA es de entre el 50 y el 85%. Es decir, más de la mitad de los jugadores fuman cannabis.