El martes, la policía de Uvalde de Texas, Estados Unidos, reportó el trágico episodio en el que el agresor de 18 años, llamado Salvador Ramos, decidió abrir fuego en una escuela contra decenas de personas, dejando un saldo de 16 muertos, gran parte de ellos, menores de edad. Recientemente, los investigadores del caso descubrieron que Salvador Ramos, el autor del hecho había anticipando unos minutos antes a través de sus redes sociales el asesinato que estaba a punto de cometer.
Trascendió que el joven en la primera publicación había revelado que iba a pegarle un tiro a su abuela. Unos 5 minutos más tarde, procedió a contar por medio de una nueva publicación que había efectuado el disparo que terminó con la vida de la madre de su progenitora. Y un rato más tarde, Salvador reveló que estaba por ir disparar en una escuela primaria.
Salvador Ramos, el joven identificado como el autor de la masacre, vivía con su madre y, a veces, con su abuela, según contó su amigo Santos Valdez, que también aseguró que el chico sufría maltratos e intimidaciones por parte de otros estudiantes, y que a veces comenzaba peleas con ellos.
Su amigo relató que una vez, se encontró con Ramos en un parque donde jugaban basket y este último tenía cortes en toda la cara. "Primero me dijo que un gato le había arañado el rostro, pero luego me contó la verdad, que se cortaba la cara con cuchillos una y otra vez. Yo pensaba: estás loco, hermano. ¿Por qué harías eso?’”, dijo Valdez.
Tras ser consultado por medio locales acerca de cuál creía que era el motivo de la masacre, Valdez, el amigo del implicado en el caso, dejó sin palabras a todos:"Ramos lo hizo por diversión".