El primogénito de Meghan Markle y el príncipe Harry fue declarado ciudadano estadounidense y deberá elegir qué hacer a sus 18 años.
Archie, el bebé de 6 meses hijo de Meghan Markle y el Príncipe Harry es ciudadano tanto de los Estados Unidos como del Reino Unido.
Si bien Archie nació en Gran Bretaña y se espera que sea criado allí, él mantiene la ciudadanía estadounidense de su madre.
El pequeño de la realeza británico-estadounidense se criará rodeado de ambas culturas e incluso tendrá que pagar impuestos en ambos lugares.
De acuerdo con las pautas del Departamento de Estado de los EE. UU., Archie tiene la ciudadanía estadounidense porque nació en el extranjero en el matrimonio de una ciudadana estadounidense que ha vivido en los EE.UU. durante un período de cinco años,
Esto significa que a lo largo de la vida del Archie, tendrá sus activos e ingresos expuestos a los impuestos de los Estados Unidos. Esto implica cualquier ingreso “no derivado del trabajo" superior a 2.100 dólares, hasta que tenga 18 años.
Como ya se sabe las finanzas de la familia real se mantienen en secreto, pero podrían estar expuestas a la autoridad fiscal de USA, el IRS, para garantizar que tanto Markle como su hijo estén pagando los impuestos correspondiente.
En cuanto Archie cumpla 18 años, tiene la opción de renunciar a la ciudadanía estadounidense, si así lo deseara.
Esto lo liberaría de tener que pagar impuestos en dos lugares, ya que ya no necesitaría hacerlo en Estados Unidos.
La duquesa Meghan Markle está orgullosa de sus raíces estadounidenses y muy feliz de llevar a Archie s su tierra natal cuando viajen a Los Ángeles a finales de este mes.
Se espera que los Duques pasen el primer Día de Acción de Gracias de Archie con la madre de Meghan, Doria Ragland, durante un descanso de seis semanas del servicio real.