Tras 8 años de la abdicación del que hasta entonces era conocido –y protegido– como “el rey que salvó a la democracia española”, la ex amante de Juan Carlos I, Corinna Larsen, volvió a revelar información desconocida hasta hoy de algunos episodios vividos en aquella etapa en la que, a pesar de que ya no tenían una relación de pareja, el rey emérito seguía muy presente en su vida.
Sobre esa línea, la mujer dio detalles de los días previos a la escandalosa foto del padre del rey Felipe VI de España en África. En un nuevo episodio de su podcast titulado "Matar a Dumbo", Larsen describe como la caída en aquel safari en la que el rey de entonces se quebró la cadera fue también la caída institucional y personal del hombre que por casi cuatro décadas había sido considerado un héroe intocable para la opinión pública.
Según menciona en el podcast, Corinna Larsen y Juan Carlos I no se encontraban en buenos términos en lo que a la pareja respecta, ya que el entonces rey de 74 años le había confesado una infidelidad -única cosa que su ex amante le había remarcado que no le perdonaría-, por lo que da a entender que aquel viaje a África fue exclusivamente con tinte de amistad.
Es que, la empresaria remarcó que no estaba enterada del polémico viaje al que Juan Carlos I la invitó de sorpresa junto a su hijo menor Alexander (10 años), de hecho, señaló que fue un gesto del rey emérito hacia su hijo por su cumpleaños. Durante el relato, la mujer también señala que el monarca tenía un especial vínculo con el menor, tal así que lo describe como su "padre espiritual".
Bajo ese marco, Larsen detalló que una vez en Botswana se trasladaron a un camping de lujo donde cada uno tenía su propia carpa -con todos los lujos y comodidades-. Continuando con su relato, la mujer indica que mientras ella solía acompañar a su hijo a un safari apto para menores, Juan Carlos I se iba a cazar elefantes -actividad legal en la zona en la que estaban-.
No obstante, recuerda que el motivo que desencadena toda la polémica y caída del monarca se da a raíz de una noche de juerga en la que Juan Carlos I hizo una fiesta en su carpa y terminó cayéndose borracho, provocándole una hemorragia interna.
Finalmente, Corinna Larsen relata la historia que trascendió en los medios, el rey emérito siendo internado debido a su cadera rota, España convulsionada tras la filtración de la foto de Don Juan Carlos I cazando elefante y el destape de su relación extramatrimonial con Larsen. Una cadena de sucesos que mancharon la imagen del rey más querido del país europeo, que lo orilló a recluirse y desaparecer del ámbito público.
