El saltador noruego Daniel-André Tande sufrió ayer un grave accidente durante los entrenamientos de las finales de la Copa del Mundo de Saltos de Esquí, que se disputan en Planica, Eslovenia.
El deportista sufrió una caída a más de 100 kilómetros por hora y quedó inconsciente en la pista. Según informaron fuentes de su combinado nacional y del comité organizador del evento, el noruego está estable y fuera de peligro.
Tande, campeón olímpico por equipos en los Juegos Olímpicos de Invierno Pyeongchang 2018, perdió el equilibrio durante la fase de vuelo del salto cuando llegó a los 102,6 kilómetros por hora y tras la caída dio no menos de cinco tumbos.
Afortunadamente recibió asistencia médica inmediata durante media hora. Luego lo entubaron y le brindaron respiración asistida antes de ser trasladado en helicóptero al Centro Clínico Universitario de Liubliana, donde permanece internado.
“La caída nos pareció dramática, pero ahora nos sentimos aliviados después del primer diagnóstico, que indica que las lesiones sufridas por Daniel no ponen en peligro su vida”, señaló el jefe del equipo noruego, Clas Brede Brathen, en declaraciones difundidas por la Federación Internacional de Esquí.
“Las pruebas preliminares son muy prometedoras, pero tendremos que esperar 24 horas cuando vuelvan a repetirse las pruebas”, explicó el jefe de los servicios médicos del comité organizador, doctor Tomislav Mirkovic. Se informó que Tande, de 27 años, sufrió una fractura de clavícula.
El noruego ganó una medalla de plata en el Campeonato Mundial de Esquí Nórdico de 2017, en el trampolín grande por equipos. Además, de forma individual logró medallas en ocho Copas Mundiales en Alemania (tres eventos en ese país), Polonia, Noruega, Austria, Finlandia y Eslovenia.
La presea dorada en Pyeongchang 2018 fue grupal junto Robert Johansson, Johann Andre Forfang y Andreas Stjernen, con quienes también obtuvo los títulos mundiales en Bad Mitterndorf (2016); Oberstdorf, en Alemania (2018) y la pasada edición en Planica, un año atrás.